La granada es una fruta de sabor muy agradable y color llamativo, por lo que resulta perfecta para elaborar una bebida tan original como la granadina.
¿Qué es la granadina?
Esta bebida de color rojo intenso se elabora a partir del zumo de la granada, concretamente es el jarabe del jugo de dicha fruta por lo que se obtiene por cocción del zumo degranada con azúcar. La cantidad de azúcar necesaria para la elaboración del jarabe es tres veces mayor a la cantidad de granada empleada, por lo que el contenido calórico de la granadina va a ser sensiblemente superior al de la granada fresca.
Sus propiedades
La granada es una fruta que presenta interesantes virtudes nutritivas. Su valor calórico es escaso gracias a su bajo contenido en azúcar, sin embargo contiene buena cantidad de sustancias con acción antioxidante, grandes aliadas de la salud, como flavonoides y antocianinas (colorantes naturales). También posee compuestos con actividad antiséptica y antiinflamatoria como ácido cítrico y ácido málico, así como sustancias con acción astringente entre las que se encuentran los taninos.
Sin embargo, la granadina no se consume como bebida en sí misma por lo que no es lo mismo comer una granada que tomar granadina como condimento de un plato o ingrediente de alguna bebida, ya que la cantidad empleada es pequeña y por lo tanto el aporte de sustancias beneficiosas va a ser muy bajo.
También hay que valorar la cantidad de azúcar presente en la bebida, en principio mucho más alta al tratarse de un jarabe que la que contiene de forma natural la granada. Sin embargo, del mismo modo que ocurre con el resto de nutrientes, es importante observar que la cantidad de azúcares consumidos al tomar granadina no va a ser muy elevada debido las bajas dosis en las que se consume esta bebida.
La granadina en la cocina
El dulce sabor de la granadina hace que pueda emplearse en la elaboración de diferentes recetas. Las carnes de caza son uno de los alimentos que mejor encajan con el sabor de esta bebida, por lo que elaborar una salsa de granadina sería una buena idea para acompañar a este tipo de platos. Algunos postres como las peras en almíbar con granadina o la tarta de kiwi en salsa granadina son algunos de los platos que cuentan con esta bebida en su receta. También puede utilizarse como acompañamiento de helados y pasteles o tartas de frutas.
A la hora de la preparación de bebidas o cócteles, la granadina juega un papel protagonista ya que muchos de ellos deben su característico color rojo a la presencia de esta bebida. Entre ellos se pueden encontrar cócteles sin alcohol como el famoso San Francisco, elaborado con zumo de limón, zumo de piña, zumo de naranja y granadina; así como preparaciones alcohólicas como es el caso del cóctel President, en el que la granadina se añade a un combinado de ron blanco y zumo de naranja.
Conviene ser cuidadoso a la hora de emplear granadina tanto en la elaboración de platos como de bebidas ya que su alto contenido de azúcares puede enmascarar el sabor del resto de ingredientes.