En caso de avería, en ocasiones resulta más económico comprar un aparato nuevo que llevarlo al servicio técnico. Esto ocurre, sobre todo, con los pequeños electrodomésticos. Sin embargo, antes de tomar esta decisión, es posible intentar arreglarlos uno mismo. La tarea es sencilla y se resume en dos pasos: comprobar si llega corriente al enchufe y si el cable de conexión está en buen estado.
Aspiradora
En caso de avería en la aspiradora, en primer lugar se debe comprobar con un polímetro (instrumento que permite verificar el perfecto funcionamiento de un circuito eléctrico) si llega corriente al enchufe. Del mismo modo, hay que asegurarse de que el cable de conexión está en buen estado.
En algunas ocasiones, el problema radica en el interruptor del aparato, que puede estar roto. Es por ello que conviene revisarlo antes de dar cualquier otro paso.
También puede ocurrir que la aspiradora no funcione de forma correcta debido a la acumulación de residuos en el tubo. En este caso, bastará con introducir en el mismo un alambre largo para eliminar la suciedad. Para evitar que el tubo se dañe, conviene envolver el extremo del alambre con un trapo.
Si el aparato funciona de forma intermitente, habrá que revisar las escobillas del motor. Para ello, se deben aflojar las cabezas de retención situadas en la carcasa y cambiarlas si están desgastadas.
Secador de pelo
Cuando la avería se detecta en un secador de pelo, se puede registrar en el ventilador, la resistencia, las conexiones o el cable. Si el fallo se origina en este último, se deben retirar los tornillos de fijación para poder abrir la carcasa. A continuación, se sustituye el cable por otro de las mismas características.
Si sale aire pero es frío, el problema radica en la resistencia
Si el secador se calienta pero no expulsa aire, habrá que abrir la carcasa para poder aflojar los tornillos laterales del motor. Tras verificar el estado de las conexiones, se debe comprobar el estado de las escobillas.
Si sale aire, pero éste es frío, el problema radicará en la resistencia, por lo que la solución será sustituirla por otra de las mismas características.
Antes de cerrar la carcasa conviene limpiar el interior del aparato para eliminar cabellos y otros restos de suciedad.
Si el problema reside en el cable de alimentación, ya sea porque está quemado o estropeado en una zona, se corta la parte deteriorada con unas tijeras de electricista para evitar dañar los filamentos, aunque es preferible reemplazarlo por uno nuevo. Las tijeras de electricista se caracterizan porque sus hojas tienen recortada la silueta de un semicírculo de pequeñas dimensiones. Al juntar ambas hojas, el cable se inserta en el hueco que queda (con forma de círculo) y corta el contorno que envuelve los filamentos.
Si el problema reside en el cable de alimentación, hay que cortar la parte deteriorada con unas tijeras de electricista
Si se opta por el arreglo, se corta un centímetro de la cubierta aislante de los cables, con cuidado de no dañar los conductores de cobre. Después, se retuercen los filamentos y se insertan en las conexiones de la regleta. Para ello, se aflojan los tornillos de sujeción de cada cubo, se introducen los extremos del cable en las clemas correspondientes y se atornilla.
