Los alimentos grasos y proteicos son los preferidos por los menores para comidas y cenas, según un estudio sobre hábitos de consumo y alimentación en los niños madrileños elaborado por la Fundación Internacional de la Salud, la Confederación de Consumidores y Usuarios (CECU) de Madrid y la Federación de Comercio Agrupado y Mercados de la Comunidad de Madrid (COCAM).
Los niños que participaron en el estudio realizaron una experiencia real de compra después de recibir una charla de una experta nutricionista de la Fundación Internacional de la Salud. Los menores optaron para comer o cenar por la carne -salchichas o filetes de pollo-, platos precocinados -tortilla de patata o pasta- y lácteos, en detrimento de la verdura, las frutas o el pescado. Ninguno de los menores eligió legumbres.
El trabajo, cuyos resultados se presentarán en la próxima edición de la Feria Internacional de la Salud (Fisalud 2009) y se utilizarán para elaborar una guía formativa y material didáctico audiovisual, también refleja que para el almuerzo y la merienda los menores optaron por la bollería industrial, los snacks y el chocolate. En el caso del desayuno, prefirieron cereales, lácteos y fruta.
Los autores del estudio recordaron que es necesario corregir los malos hábitos alimenticios y de compra en la población infantil y juvenil para reducir las cifras de obesidad (13,9%) y sobrepeso (12,4%)