El Instituto Europeo de Oncología, situado en Milán (Italia), ha realizado un estudio que demuestra que los dispositivos intrauterinos (DIU) que se utilizan habitualmente como contraceptivos podrían ser eficaces en el tratamiento y cura del cáncer endométrico, además de permitir a las mujeres alargar su fertilidad.
Este hallazgo, publicado en la edición on line de «Annals of Oncology», abre una puerta a las mujeres que sufren este tipo de cáncer, ya que puede permitir que se les trate sin necesidad de realizar una histerectomía, de manera que se preserve su fertilidad durante más años. Este tipo de cáncer es actualmente el sexto más común en mujeres de todo el mundo y se estima que en 2008 supuso un 4,8% de todos los tumores femeninos, así como el 2,2% de las muertes por esta enfermedad en mujeres.
El tratamiento habitual hasta ahora consiste en la extracción total de ovarios y útero. En ocasiones, las mujeres pueden recibir una terapia hormonal que ralentiza el crecimiento del cáncer, pero con efectos secundarios como alergias cutáneas, nauseas, vómitos, dolor de cabeza y sangrado uterino. El equipo científico del Instituto Europeo de Oncología ha llevado a cabo el primer ensayo clínico para comprobar si mediante la liberación progresiva de hormonas levonogestrel a través del DIU, combinado con una inyección mensual de hormonas gonadotropinas (GnRH) durante seis meses, se podría detener y revertir el crecimiento del tumor en mujeres menores de 40 años.
Las mujeres participantes en el estudio contaban una hiperplasia endometrial atípica, un estado precedente al cáncer endométrico, o se encontraban en una fase temprana de cáncer endometrial. Las participantes tuvieron el DIU durante un año y tras retirárselo, se les permitió que se quedasen embarazadas, siempre y cuando el cáncer no hubiese crecido o recurrido. Los investigadores realizaron un seguimiento de las mujeres durante los seis meses siguientes desde que se les retiró el DIU para comprobar que el cáncer no progresaba.
Los resultados demostraron que de 20 pacientes con hiperplasia, 19 (95%) tuvieron una respuesta total al tratamiento, a pesar de que cuatro de ellas experimentaron recaídas y necesitaron volver a ser tratadas. De 14 pacientes con un cáncer en estadio inicial, ocho de ellas (57,1%) tuvieron una respuesta completa y la enfermedad sólo progresó en cuatro mujeres (28%). Dos de estas pacientes que tuvieron una respuesta total sufrieron recaídas. Tras el tratamiento de cualquiera de las recaídas o recurrencias, bien mediante un nuevo DIU, con terapia de GnHR o en algún caso con histerectomía, todas las mujeres sobrevivieron a la enfermedad sin ningún efecto secundario. Además, nueve mujeres lograron 11 embarazos espontáneos, de los cuales llegaron a nacer nueve niños.