Las luces LED tienen múltiples aplicaciones dentro del ámbito doméstico. Iluminan, decoran y permiten ahorrar energía. Además del formato tradicional en forma de bombillas, se pueden adquirir tiras de LED flexibles, muy indicadas para la cocina y el baño, ya que se colocan como luces indirectas a lo largo de las estanterías o bajo estas, así como en los muebles altos o en el contorno de los espejos. Gracias a la tecnología LED, también se da color a los grifos de baños y cocinas, que se iluminan y cambian de color en función de la temperatura del agua.
Luces y tiras LED
En el caso particular de la cocina y el baño, son muy adecuadas las tiras de LED, ya que se colocan como luces indirectas en la parte superior o inferior de las estanterías. También son una buena opción para instalar en los muebles altos y en el contorno de los espejos.
Dado que estas estancias están sometidas a condensaciones de vapor de agua, la mejor opción son las tiras sumergibles. Su protección de silicona, estanqueidad y aislamiento eléctrico hacen de estas luces la solución idónea para su uso en zonas con un alto índice de humedad.
Si la habitación cuenta con un falso techo, se obtiene una iluminación ambiental muy natural si se colocan tiras o lámparas LED en las fosas perimetrales o canaletas que recorren el perímetro del mismo.
La tecnología LED tiene una nueva aplicación: dar color a los grifos de baños y cocinas. Además del aspecto estético, con los grifos LED es posible saber qué temperatura tiene el agua, según el color del LED. Los modelos más sencillos se iluminan de color azul cuando el agua está fría y de rojo cuando está caliente. Los más sofisticados se vuelven verdes, azules, amarillos o rojos, en función de los grados. Es posible adquirir adaptadores LED preparados para colocar en grifos, incluso grifos en cascada, y cabezales de ducha.
Las boquillas o adaptadores LED se enroscan en cualquier grifo de cocina o baño
Los grifos LED en cascada tienen un diseño muy llamativo. La pieza por donde sale el agua y se ilumina es transparente y tiene forma cuadrada. Además, es bastante ancha, por lo que el agua cae como si fuera una cascada, de ahí el nombre.
Una opción más económica que los modelos integrales son las boquillas LED. Estos adaptadores se enroscan en cualquier grifo de cocina o baño y su funcionamiento es el mismo que el de los modelos integrales. Al fluir el agua a través del LED, este se ilumina de acuerdo a la temperatura del agua. Para que esto sea posible, cuentan con una pequeña batería que, en general, se alimenta con cuatro pilas AA.
También es posible disfrutar de la tecnología LED en la ducha. Hay cabezales de ducha equipados con detectores luminosos de temperatura. El objetivo es evitar las clásicas quemaduras ocurridas cuando el agua está demasiado caliente.