Efectos del cáncer en la vida sexual
Algunos tipos de cáncer inciden más directamente que otros en la sexualidad, por ejemplo, el cáncer de útero, próstata, mama, etc. En algunos momentos, el dolor, el cansancio o las preocupaciones propias del proceso de enfermedad pueden afectar al deseo sexual. Es una reacción común en un periodo de inquietudes y preocupaciones.
Por otra parte, el cáncer influye en la imagen que tenemos de nosotros mismos. En muchas ocasiones, la enfermedad y el tratamiento obliga a un cambio en el aspecto físico y la imagen que se da ante las demás personas. En este sentido, puede ser difícil aceptar tales cambios y volver a interesarse por la actividad sexual.
Todo esto puede requerir de un tiempo. Es un proceso variable de persona a persona en el que se produce una adaptación continua a los cambios, y que finalizará en una completa recuperación tanto física como emocional.
En este sentido, tras la recuperación física y psicológica, la enfermedad no tiene por qué ser un impedimento para seguir manteniendo una vida sexual similar a la anterior.
Ideas erróneas sobre sexualidad y cáncer
Son frecuentes los temores y prejuicios cuando se trata el tema de la sexualidad y el cáncer. Como consecuencia de ello, se incrementan las preocupaciones y las angustias tanto de la persona enferma como de su pareja. Entre las principales dudas que aparecen, destacamos las siguientes:
🟢 ¿Se puede contagiar el cáncer a través del contacto sexual?
No, el cáncer no se contagia. No existe el menor peligro de contagio para la pareja.
🟢 ¿Puede ser el sexo perjudicial para una persona con cáncer?
En general, para las personas con cáncer, tener relaciones sexuales no es perjudicial. Sin embargo, el personal sanitario debe informar sobre el mejor momento para iniciar las relaciones sexuales, ya que son quienes mejor conocen cada proceso particular. Por ello, estos profesionales deben indicar si la actividad sexual puede causar algún problema con el tratamiento oncológico pautado (quimioterapia, radioterapia, cirugía, etc.). Se tiene que consultar en cualquier caso.
🟢 ¿Pueden las relaciones sexuales provocar el empeoramiento o la reaparición de la enfermedad?
No, reanudar las relaciones sexuales después del tratamiento no incrementa la posibilidad de que el cáncer empeore o reaparezca.
Muchas personas con cáncer, incluso sus parejas, temen que por mantener relaciones sexuales la enfermedad empeore o reaparezca. Sin embargo, desde un punto de vista científico no hay razón alguna para que las relaciones sexuales causen o provoquen la reaparición de la enfermedad.
🟢 ¿Puede ser el sexo perjudicial para tu pareja?
No, ni el cáncer ni el tratamiento oncológico hacen que las actividades sexuales sean peligrosas para la pareja.
- Una persona que esté recibiendo o haya recibido sesiones de radioterapia no traspasa a su pareja las radiaciones: estas solo actúan en el momento en que los rayos inciden en el organismo de la persona tratada.
- Por otra parte, la quimioterapia se elimina poco a poco del cuerpo de las personas tratadas y no constituye ningún riesgo para la pareja.
Por tanto, tener relaciones sexuales durante el tratamiento de la enfermedad no expone a la pareja a los efectos de las radicaciones o de la quimioterapia.
Pautas que pueden facilitar las relaciones sexuales
Hay algunas cuestiones importantes que se deben tener en cuenta en el momento en que la persona con cáncer se plantea continuar con su vida sexual durante y después del tratamiento.
🔶 Información y comunicación con el personal sanitario
El primer paso que se debe tener en cuenta es plantear al equipo sanitario todas las dudas o preocupaciones que aparezcan respecto a la sexualidad. Todo el mundo tiene derecho a conocer cómo afecta su enfermedad o los tratamientos que están recibiendo a su alimentación, al dolor, a su vida laboral, y también es importante saber cómo afecta a su vida sexual.
Puede ser positivo mantener una reunión conjunta con el personal sanitario y la pareja y hablar de la influencia de la enfermedad en la vida sexual. Preguntando se consigue disponer de más información y se potencia la confianza, la proximidad y la sinceridad.
Aunque puede parecer un tema un tanto embarazoso, es demasiado importante como para dejarlo aparte sin buscarle una solución. La información y comunicación permite saber qué se puede esperar y de esta forma afrontar del mejor modo posible la situación. No hay que olvidar que el peor enemigo de las relaciones sexuales es el silencio.
🔶 Información y comunicación con la pareja
Haber hablado con el personal sanitario de la nueva situación puede hacer que los miedos y preocupaciones hayan desaparecido. Sin embargo, lo importante es darte tiempo para estar preparado, hablar con la pareja y explicar cómo te encuentras y si deseas o no iniciar de nuevo las relaciones sexuales, aportándole algunas ideas sobre cómo puede ayudar a que te sientas mejor y cómo se siente ella.
Muchas parejas que desarrollan un problema sexual son incapaces de conversar sobre su sexualidad. En estos casos, la pareja no solo es incapaz de expresar sus preocupaciones y necesidades, sino que además cada parte debe tratar de adivinar lo que piensa o siente la otra. Estas conjeturas pueden llevar a interpretaciones erróneas que contribuyen, a su vez, a dificultar la práctica sexual.
Una buena comunicación es también clave para reanudar la vida sexual cuando el cáncer la interrumpe. En cambio, una comunicación incompleta o su ausencia entre los miembros de la pareja puede causar o mantener el problema sexual.
🔶 Caricias y abrazos
Independientemente de la enfermedad y del tipo de tratamiento oncológico, las caricias entre la pareja siempre son posibles. La capacidad para sentir placer con el contacto siempre permanece, incluso si algunos aspectos de la sexualidad han cambiado.
Puede ser un buen momento para aprender nuevos modos de dar y recibir placer, ayudándose mutuamente a sentir placer a través de caricias y abrazos.
No hay que negarse ningún modo de sentir o mostrar cariño y amor solamente porque la rutina haya sido alterada.
🔶 Otros consejos
Otras pautas que pueden ayudar a hacer más satisfactorias las relaciones íntimas son:
- Un ambiente cálido, íntimo y relajado puede favorecer las relaciones sexuales.
- Una buena comunicación y, sobre todo, la expresión de deseos y necesidades sexuales de forma clara y directa ayudan a la relación.
- En la relación sexual es importante la espontaneidad, la flexibilidad y la disposición.
- El afecto y el contacto físico deben mostrarse a lo largo de todo el día y no reservarse solo para “ciertos momentos”.
- Para obtener una relación satisfactoria y placentera no es necesaria la realización del coito o ponerse el orgasmo como meta. La sexualidad es algo más que aproximaciones genitales. Puede obtenerse un alto grado de satisfacción a través de la intimidad que acompaña a una relación física, cálida y cariñosa, incluso si no es factible una respuesta sexual completa para uno u ambos miembros de la pareja.
Igual que el personal sanitario, en la Asociación Contra el Cáncer queremos estar a tu lado y, para ello, ponemos a vuestra disposición un servicio gratuito de apoyo psicológico que puede ayudarte tanto a ti como a tu pareja a superar vuestras preocupaciones y a mejorar las relaciones. Contacto con la Asociación en el 900 100 036 (24 horas al día los 365 días del año).