Nutrientes para la boca
🔹 Proteínas
Comer las cantidades necesarias de proteína ayuda a que los menores desarrollen su dentadura correctamente. También previene el retraso en la erupción de los dientes y ayuda a que las piezas sean más fuertes y resistentes.
🔹 Flúor
Este mineral disminuye el riesgo de caries. Esto se debe a que remineraliza el esmalte dental y reduce la capacidad de las bacterias para producir ácido. Algunos alimentos con alto contenido de flúor son el pescado, algunos tipos de té y la leche.
🔹 Alimentos crocantes
Las comidas crocantes con alto contenido de fibra ayudan a la limpieza natural de dientes y encías. Además, estimulan la salivación. Algunos de estos son la manzana, la zanahoria y el pepino.
🔹 Riboflavina
El déficit de la vitamina B2 ocasiona inflamación en la lengua y en los labios, así como la aparición de grietas en ellos. Alimentos como los huevos, los lácteos, las carnes magras y los vegetales de hoja verde son ricos en esta vitamina.
🔹 Agua
Es indispensable para mantener una buena salud y nutrición. Además de mantener todo tu organismo hidratado, favorece la producción de saliva y regula la reproducción de bacterias en la boca.
🔹 Menos alimentos azucarados
Estos productos, en especial los que permanecen más tiempo en la boca, como los caramelos, chicles y similares, aumentan el riesgo caries.
Los beneficios del agua para nuestra salud oral
El agua no solo es una gran aliada de nuestro organismo, también lo es de nuestra sonrisa. Así puede ayudar a nuestra boca:
- El agua arrastra los restos de alimentos de los dientes y ayuda a a mantener el aliento fresco, lo que a su vez ayuda a eliminar las bacterias que causan el mal olor.
- Ayuda a reducir el efecto de las manchas, porque elimina de forma natural todas las partículas que se pegan a los dientes.
- Mantiene un equilibrio de pH saludable en la boca, lo que reduce el riesgo de caries y la erosión del esmalte. Se recomienda beber uno o dos vasos de agua al final de la comida para limpiar bien la cavidad bucal de los restos de comida, bacterias y ácidos que queden.
- Previene la sequedad bucal, lo que hace que produzcamos menos saliva de la que normalmente se necesitaría. También ayuda a la cicatrización de aftas (pequeñas úlceras) y pequeñas heridas en la boca.
Enfermedades vinculadas a una «mala boca»
▪️ Caries y diabetes
Cuando los niveles de azúcar en sangre están altos, también lo están en la saliva. Las bacterias que hay en la placa dental se alimentan del azúcar y pueden causar caries y enfermedad de las encías, una patología que puede resultar más grave en personas con diabetes, ya que suele ser más difícil de manejar.
Según diferentes estudios, hay una relación estrecha entre la diabetes y las enfermedades relacionadas con las encías y se ha demostrado que las personas diabéticas tienen mayor incidencia de periodontitis, gingivitis y caries.
▪️ Gingivitis y deterioro cognitivo
Son muchos los estudios que vinculan las infecciones bacterianas (como las enfermedades de las encías) con una de las posibles causas del deterioro cognitivo leve y posterior demencia.
Un estudio publicado en Neurology, la revista de la Academia Americana de Neurología, observó la salud dental de un grupo de personas durante 20 años y encontró que aquellas con una periodontitis más grave al comienzo de la investigación tenían aproximadamente el doble de riesgo de deterioro cognitivo leve o demencia que las que partieron con una boca sana.
▪️ Encías y problemas de corazón
La Sociedad Europea de Cardiología ha incluido la periodontitis como un factor de riesgo cardiovascular. Las personas que sufren esta patología de las encías tienen un 25 % más de probabilidades de sufrir una enfermedad cardiaca coronaria.
Los microorganismos orales, presentes en la periodontitis, pueden pasar a la sangre y la respuesta inflamatoria producida se puede extender por todo el organismo, provocando que las personas que la sufren puedan tener más riesgo de contraer o empeorar alguna enfermedad cardiovascular.