Diabetes tipo 1 y tipo 2: distintos riesgos, distinta respuesta
La diabetes es una patología crónica que afecta a la capacidad del organismo para sintetizar la glucosa. Hasta aquí, la definición engloba ambos tipos de diabetes: la tipo 1 y la tipo 2. Sin embargo, cuando hablamos de causas, tratamientos y, en este caso, de riesgos, es muy importante conocer la diferencia que existe entre ambos tipos para no inducir a confusiones entre los pacientes.
La diabetes tipo 1 se produce cuando, a consecuencia de una respuesta autoinmune del organismo, el páncreas deja de producir insulina, impidiendo la síntesis de la glucosa. Esto produce las conocidas hipo e hiperglucemias: aumentos y descensos de los niveles de azúcar en sangre por encima o por debajo de rangos seguros. Habitualmente, los pacientes reciben el diagnóstico de diabetes tipo 1 desde edades tempranas, aunque en los últimos tiempos se ha comprobado que esta enfermedad también puede dar la cara en personas adultas.
Una diferencia importante entre este tipo de diabetes y la tipo 2 es que no podemos hacer mucho para prevenirla: sus causas son desconocidas, aunque hay consenso en que posee un fuerte componente genético.
Por eso, cuando hablamos de prevención de la diabetes, y más específicamente, de prevención basada en hábitos de vida, nos estaremos refiriendo a la diabetes tipo 2. Esta condición, en la que el organismo desarrolla resistencia a la insulina, encuentra sus causas en el sedentarismo, la mala alimentación o hábitos nocivos como el tabaco o el alcohol. En este caso sí es una patología que se puede prevenir, controlar e, incluso, revertir con intervenciones basadas en el estilo de vida.
La importancia de la prevención
La Organización Mundial de la Salud (OMS) habla de dos pandemias silenciosas a nivel global, cuyo aumento se ha desarrollado en paralelo a lo largo de los últimos años: la obesidad y la diabetes tipo 2. Las causas de este incremento hay que buscarlas en algunos cambios generalizados que se están dando en el modo de vida, con un mayor sedentarismo, estrés, problemas para conciliar el sueño y un deterioro en la calidad de la alimentación (entre otros) a nivel global.
Es aquí donde diferentes organizaciones de la sociedad civil, asociaciones de pacientes, sociedades científicas, entidades públicas e instituciones sanitarias buscan poner el foco para, a través de campañas de sensibilización, concienciar sobre la importancia de llevar un estilo de vida saludable.
Sin embargo, esto no es suficiente: además de la concienciación, es necesario garantizar el acceso a los recursos necesarios para implementar dichos cambios y destinar partidas económicas para lograrlo. Poder alimentarse de forma saludable, disponer del tiempo de ocio suficiente para realizar ejercicio a diario o tener una asistencia sanitaria de calidad deberían estar garantizados para toda la población, con el fin de frenar el avance de la diabetes tipo 2.
14 de noviembre, descubrimiento de la insulina
El Día Mundial de la Diabetes (DMD) fue establecido en 1991, de forma conjunta entre la IDF y la OMS, como una manera de concienciar sobre la necesidad de frenar el avance de esta patología. La fecha conmemora el aniversario del nacimiento de Frederick Banting, quien, junto con Charles Best, concibió la idea que llevó al descubrimiento de la insulina en 1921.
Así, esta fecha se asienta como un día en el que reivindicar la necesidad de una mayor concienciación y la puesta en marcha de mecanismos de sensibilización y educación. Cada año, el Día Mundial de la Diabetes gira en torno a un tema específico, destacando diferentes aspectos de la enfermedad, desde la prevención hasta la gestión y la importancia de la educación.
Este día, las asociaciones de pacientes tienen un papel fundamental para hacer visibles sus reivindicaciones y sus necesidades ante las administraciones públicas y la sociedad civil en general. Como representantes del asociacionismo de pacientes a nivel nacional, la Federación Española de Diabetes (FEDE) trabaja para dar a conocer esta importante labor de todos sus asociados, al igual que sus federaciones a nivel autonómico y sus asociaciones a nivel local.