Investigación innovadora
El estudio ‘Consumo de alimentos ultraprocesados y parámetros de calidad del semen en el estudio Led-Fertyl’, publicado en la revista Human Reproduction Open, marca un hito al ser el primer análisis que establece una relación entre el consumo de UPF y la calidad del semen.
En la investigación, llevada a cabo por la Universitat Rovira i Virgili (URV), en colaboración con el Instituto de Investigación Sanitaria Pere Virgili (IISPV) y el área de Fisiopatología de la Obesidad y Nutrición del CIBER (CIBEROBN), participaron 200 hombres sanos en Cataluña, con edades comprendidas entre los 18 y 40 años. Formaban parte del Proyecto LedFertyl (Lifestyle and Environmental Determinants of Seminogram and Other Male Fertility-Related Parameters) durante el periodo comprendido entre febrero de 2021 y abril de 2023.
Nancy Babio, coordinadora del Grado en Nutrición Humana y Dietética y una de las autoras del estudio., explica que fue hace unos años cuando “se inició en nuestro grupo esta línea de investigación donde, a través de una intervención nutricional con frutos secos, se observó una mejoría en la calidad espermática. También se evaluó la relación entre la adherencia a la dieta mediterránea y la calidad del semen”.
A la luz de estos resultados, los investigadores de la Universitat Rovira i Virgili decidieron ampliar su análisis evaluando el impacto del consumo de una alimentación no saludable, como es el caso de los ultraprocesados. «Todo sugiere que la calidad del esperma también está influida por el tipo de dieta que seguimos«, indica Babio.
Así afectan los ultraprocesados a la calidad del esperma
Los participantes de estudio fueron sometidos a un completo proceso de evaluación, respondiendo a diversos cuestionarios y entrevistas diseñados para identificar con precisión sus perfiles sociodemográficos, hábitos alimenticios, estilo de vida y antecedentes médicos. Paralelamente, se realizaron pruebas de sangre, orina y semen.
Los resultados sugirieron que un mayor consumo de ultraprocesados se asocia con una peor calidad del semen. Esta relación se manifiesta en la reducción del recuento total de espermatozoides, la concentración y la movilidad total.
“La propia producción de productos UPF preparados y listos para el consumo puede facilitar la transferencia de ciertos disruptores endocrinos (bisfenoles y ftalatos, unos compuestos químicos que pueden alterar funciones hormonales) del embalaje plástico de los alimentos, junto con la ingesta de conservantes alimentarios, los cuales se han asociado con una menor calidad del semen y daño del ADN”, apunta Babio.
La dieta mediterránea, buena para la salud reproductiva
No es la primera vez que el grupo de investigadores de la URV analiza la relación entre la ingesta de ciertos alimentos y su impacto en la salud reproductiva. En un estudio previo evidenciaron que una mayor adhesión a la dieta mediterránea estaba vinculada a una mejor calidad del esperma. Y en una revisión sistemática identificaron qué alimentos, nutrientes y patrones dietéticos se asociaban de manera positiva o negativa con este factor crucial para la salud reproductiva.
“En general, las personas que llevan un elevado consumo de UPF toman menos alimentos fuentes de antioxidantes como verduras, frutas, frutos secos y legumbres. En este sentido, ya existen estudios que relacionan el consumo de algunos antioxidantes como las vitaminas C, E, beta-caroteno, folato, zinc, así como los omega 3 con mejoras en los parámetros de calidad del esperma en estudios anteriores. Estos nutrientes al ser antioxidantes podrían tener un efecto protector indirecto sobre la calidad del semen al evitar producción de especies reactivas de oxígeno y estrés oxidativo”, detalla la investigadora.
De confirmarse estos resultados, podrían actualizarse o diseñarse programas preventivos e intervenciones específicas para abordar la infertilidad masculina. “Aún queda mucho por estudiar; este estudio es observacional. Necesitamos más estudios longitudinales y, especialmente, estudios de intervención para llegar a las recomendaciones basada en la evidencia. Aunque todo apunta que llevar una alimentación saludable ayuda a prevenir los problemas de fertilidad masculina”, concluye Babio.
Otros aspectos que afectan a la salud reproductiva
Entre el 8 y el 12 % de las parejas en edad reproductiva tienen dificultades para concebir. Las probabilidades de no tener descendencia son mucho mayores en las personas que padecen ciertas enfermedades durante su adolescencia y juventud. Los investigadores de la Universitat Rovira i Virgili destacan que entre el 40 y el 50 % de los casos de infertilidad se atribuyen a factores masculinos. Subrayan que la disminución en la calidad del esperma observada en las últimas décadas se debe tanto a factores ambientales como al estilo de vida actual.
La contaminación ambiental, el consumo de drogas ilícitas, el tabaquismo, la ingesta de alcohol, la exposición dietética a sustancias químicas que alteran el sistema endocrino, el estrés psicológico y las dietas no saludables también están involucrados en la etiología de la baja calidad del semen. Dada su naturaleza modificable, reducir la exposición a estos factores podría ser una medida adecuada en la prevención de la infertilidad, destaca el grupo de científicos de la URV.