¿Qué es el teflón?
El politetrafluoroetileno (PTFE), más conocido como teflón —que en realidad es el nombre comercial del material— es un polímero similar al polietileno. Fue descubierto en 1938 por el químico Roy Plunkett mientras trabajaba para la multinacional química DuPont. Sin embargo, su uso a gran escala no comenzó hasta la década de 1970.
Una de las características más destacadas del teflón es su capacidad para resistir temperaturas extremas, soporta hasta 260 ºC sin experimentar cambios en sus propiedades. Además, el teflón muestra una alta resistencia a productos químicos y solventes, destaca por su baja fricción y su excepcional capacidad antiadherente.
Aplicaciones del teflón
El teflón es un material altamente versátil y funcional que se utiliza en una variedad de aplicaciones, entre las que están las siguientes:
- Utensilios de cocina: la propiedad antiadherente del teflón lo convierte en un material idóneo para recubrir sartenes, ollas, cazos, cacerolas, sandwicheras y moldes, entre otros utensilios.
- Menaje del hogar: empleado en las suelas de las planchas, asegura un deslizamiento suave sobre las telas. Esto simplifica el proceso de planchado y evita que las telas se adhieran.
- Industria automotriz: el teflón resulta perfecto para reducir la fricción y el desgaste en componentes como juntas, cables y cojinetes.
- Ámbito médico: protege implantes y otros dispositivos del cuerpo humano.
- Industria textil: el teflón se usa para crear tejidos impermeables y transpirables.
- Electrónica: es un material muy útil para aislar cables y componentes electrónicos.
¿Son seguras las sartenes de teflón?
Las sartenes de teflón no presentan ningún riesgo para la salud, siempre que se utilicen de forma adecuada. “Si nos preocupamos de lo que comemos, hagámoslo también de la integridad de los equipos en los que cocinamos, eso sí, sin miedo”, destaca Gemma del Caño, farmacéutica, divulgadora científica y experta en innovación, biotecnología, seguridad y calidad.
Sin embargo, existen dos consideraciones importantes relacionadas con el teflón:
- El politetrafluoroetileno puede liberar gases tóxicos, pero tan solo cuando se somete a temperaturas superiores a 260 ºC. Al cocinar los alimentos es casi imposible alcanzar esas temperaturas, a no ser que queramos servir un plato completamente carbonizado.
- Si no se mantienen las sartenes de forma adecuada, la cubierta de teflón puede rayarse, provocando que el recubrimiento se desprenda y libere microplásticos y nanoplásticos durante el cocinado de los alimentos. Según un estudio, una pequeña grieta podría liberar hasta 2.300.000 de estas partículas. No obstante, los investigadores subrayan la importancia de seguir estudiando sobre este tema.
Características de las sartenes de teflón
Las sartenes de teflón son utensilios de cocina muy populares y no representan ningún riesgo para nuestra salud si están en buen estado y se usan de modo correcto. Estas sartenes tienen varias características que las hacen perfectas para cocinar:
- Antiadherencia: los alimentos no se pegan a la superficie, lo que facilita la cocción y evita que se quemen.
- Fácil mantenimiento: se pueden limpiar utilizando solo agua y jabón.
- Durabilidad: las sartenes de teflón resisten altas temperaturas y, si se cuidan de manera adecuada, conservan su estado sin desgastarse, asegurando así una larga vida útil.
- Cocción saludable: permiten cocinar con menos aceite, reduciendo el contenido de grasa en las comidas.
- Versatilidad: estas sartenes son aptas para cocinas de gas, eléctricas y de inducción.
Alternativas a las sartenes de teflón
Si se prefiere evitar las sartenes de teflón, existen varias opciones disponibles, como sugiere Del Caño. No obstante, destaca que «a la hora de elegir, si lo que se busca es que duren mucho, va a depender del uso que se les dé«.
- Aluminio y teflón: las más comunes, pero hay que tener en cuenta que se rayan con facilidad. Utilizar utensilios de silicona evitará daños en el recubrimiento.
- Hierro: pesadas y resistentes, requieren cierta habilidad para evitar que los alimentos se peguen. Si se quedan húmedas, pueden oxidarse.
- Aluminio y titanio: cuentan con una capa antiadherente reforzada con titanio, lo que las hace duraderas. Su principal inconveniente, su precio: es más elevado.
- Cerámica: estas sartenes están muy de moda, pero se rayan con facilidad y su capa antiadherente se desgasta con el tiempo.
- Acero inoxidable: las preferidas de los cocineros profesionales, aunque no son antiadherentes y requieren cierta práctica en su uso.
- Aluminio: económicas y ligeras, distribuyen el calor de manera uniforme, pero no resultan adecuadas para alimentos muy ácidos, como el vinagre.
Consejos para cuidar las sartenes
Gemma Del Caño nos da estas recomendaciones para que la vida de nuestras sartenes sea tan larga como “saludable”.
- Olvídate de los utensilios metálicos y de la madera. Hay alternativas mucho mejores que no dañan la sartén y no suponen un riesgo de contaminación alimentaria. Opta por menaje de silicona o plástico.
- Aunque puede ser tentador, evitar lavar las sartenes en el lavavajillas prolongará su vida útil.
- Evita el uso de jabones agresivos o estropajos metálicos, ya que podrían rayar la superficie de la sartén.
- Por razones de seguridad alimentaria y para conservar la sartén en buen estado, no guardes la comida en ellas.
- Si apilas las sartenes, coloca un paño entre ellas para evitar que se rayen o se dañen.
- No enjuagues la sartén bajo un chorro de agua fría si aún está caliente. Espera a que se enfríe para lavarla.