¿Bebes directamente de las latas y disfrutas del refrescante golpe que supone la entrada de líquido por tu gaznate bebiendo a morro? … Pues siento decirte que no es la mejor de las ideas. Hoy en Consumer te contamos por qué deberías evitar beber directamente de la lata.
¿Por qué no deberías beber directamente de la lata?
Básicamente las latas, de refrescos cerveza y otras bebidas, tienden a almacenarse en entornos donde puede caer polvo suciedad, y también algunos animales pueden corretear por esa zona. Hablamos de insectos y roedores. Estas son las principales plagas que existen en este tipo de almacenes, pudiendo transmitir bacterias a la superficie exterior de la lata, e incluso a través de sus heces. Esto por supuesto se controla: no queremos decir que todas las latas que consumimos en bares y restaurantes estén manchadas de heces ni contaminada, pero aun así, el riesgo existe.
¿Basta con limpiar la lata con una servilleta?
Si decidimos limpiar con una servilleta la superficie de la lata, estaremos quitando un poquito el polvo y la suciedad visible, pero no estaremos matando bacterias. Por eso, lo mejor es verter el contenido de la lata en un vaso. Eso sí, lleva cuidado de que no estés rozando el borde de la lata porque si no, tendrán las mismas bacterias.
¿Cómo limpiar correctamente la lata?
Si aun así te encanta beber directamente de la lata, siempre puedes utilizar un poquito de detergente para limpiar la boquilla aunque está claro que fuera de casa, no es lo más práctico del mundo.
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