Las Cantidades Diarias Orientativas (CDO) son la referencia a la energía (en Kilocalorías y Kilojulios), los nutrientes de los alimentos (macronutrientes, como proteínas, hidratos de carbono, incluida la fibra, y grasas) y los micronutrientes (minerales y vitaminas) que necesitan la mayoría de las personas sanas para mantener su salud. La industria alimentaria proporciona en alimentos y bebidas la información relativa a calorías y nutrientes, según la ración que se consuma. El objetivo es que los consumidores mejoren su comprensión sobre la contribución de cada producto al logro de una dieta equilibrada.
De la teoría a la práctica
Las Cantidades Diarias Orientativas se denominan también Recomendación Diaria Aconsejada, RDA, o Cantidad Diaria Recomendada, CDR. Sus valores de energía se calculan a partir de las necesidades medias estimadas de la población. Para un adulto, este cálculo tiene en cuenta tres aspectos: el metabolismo basal, el ejercicio físico y la termogénesis. El primero es la cantidad de energía necesaria para el mantenimiento de los procesos vitales. Representa alrededor de dos tercios de las necesidades energéticas totales y varía en función de la edad (disminuye con los años), el sexo (mayor en el masculino), el tamaño y la composición corporal, el crecimiento, la ingesta, la genética, la temperatura ambiental y ciertas patologías.
El ejercicio físico representa alrededor de un tercio del gasto energético total (GET), aunque varía según la edad, el sexo y la ocupación del tiempo de ocio o la exigencia física del trabajo. La termogénesis es el gasto energético necesario para realizar los procesos de digestión, absorción y metabolismo de los nutrientes, además del gasto secundario al frío, el estrés y la toma de medicamentos. La termogénesis inducida por la dieta consume alrededor del 10% de la cantidad de calorías ingeridas.
En general, se establecen recomendaciones para una persona tipo que realiza una actividad ligera o moderada. La CDO de energía para una mujer adulta se estima en 2.000 kcal. En el caso de los hombres asciende a 2.500 kcal. Estos valores se utilizan como referencia para calcular las Cantidades Diarias Orientativas de los distintos nutrientes, ya que las necesidades energéticas y nutricionales individuales se han de adaptar según las distintas situaciones, como el nivel de actividad física, el momento de la vida (infancia, adolescencia, embarazo, lactancia) o la situación de salud o enfermedad.
Los dietistas-nutricionistas traducen a raciones de alimentos los aportes nutricionales recomendados, expresados en términos nutritivos. De esta forma, pretenden formar e informar al consumidor para que pueda hacer elecciones dietéticas más saludables. No obstante, la industria alimentaria añade de manera complementaria estos valores nutritivos en sus etiquetas para que el consumidor sepa cómo se nutre.
El papel de la industria alimentaria
En los últimos años, cada vez más fabricantes y empresas de distribución de alimentos contemplan en el etiquetado los nutrientes más susceptibles de aumentar el riesgo de padecer algún trastorno relacionado con la alimentación: grasas, grasas saturadas, azúcares y sodio (o sal). Esta iniciativa privada responde a la propuesta europea enmarcada en el Proyecto Flabel, cuyo objetivo es ofrecer un mejor diseño y formato de las etiquetas, con contenidos más claros, para que resulten más comprensibles al consumidor.Algunos fabricantes y empresas de distribución agregan pictogramas que resaltan las particularidades de un alimento según sea rico en fibra o fuente de fibra, sin grasas vegetales parcialmente hidrogenadas, sin sal o bajo en sal, sin azúcares añadidos o light.
Estas declaraciones saludables tendrán que responder a las normas establecidas por la normativa vigente, el Reglamento 1924/2006, relativo a las declaraciones nutricionales y de propiedades saludables en los alimentos.
Todos los productos de marca propia EROSKI incluyen desde septiembre de 2007 el denominado semáforo nutricional. El objetivo de este etiquetado avanzado es aportar la información de una manera más clara, completa y comprensible para el consumidor, de manera que pueda interpretar y entender con un simple vistazo los valores nutricionales y la relevancia que puedan tener en su salud.
Las particularidades del semáforo nutricional se resumen en los siguientes puntos:
- Información nutricional en el FRONTAL DEL ENVASE para que el consumidor la localice de forma rápida.
- Información nutricional POR RACIÓN del alimento para identificar de manera más sencilla la cantidad real que se ingiere de cada nutriente.
- Información de la ingesta recomendada para la ENERGÍA Y LOS NUTRIENTES considerados importantes desde el punto de vista de la salud pública (azúcar, grasa, grasa saturada, sal y fibra), por ración de alimento. Para los cuatro primeros hay definida una ingesta máxima recomendada (su consumo se debe vigilar), mientras que para la fibra se establece una ingesta diaria mínima recomendada (porque en términos generales, su consumo se debe aumentar).
- Por ración del alimento, información del porcentaje de cada uno de los nutrientes según la CANTIDAD DIARIA ORIENTATIVA (CDO) para facilitar que el consumidor conozca qué supone la cantidad de nutriente de una ración de alimento respecto a la Cantidad Diaria Orientativa.
- CÓDIGO DE COLORES. Verde, amarillo y naranja. Con un simple vistazo, el consumidor identifica si una ración del alimento tiene un alto (naranja), medio (amarillo) o bajo (verde) contenido de calorías, azúcar, grasa, grasa saturada y sal.