Perder al niño en mitad de la calle, el parque, la playa o el supermercado es un miedo frecuente. ¿Cómo evitarlo? Este artículo recoge cinco tipos de artilugios para evitar los peligrosos y angustiosos extravíos infantiles: desde sencillos globos anudados a la muñeca hasta pulseras, GPS e, incluso, tatuajes temporales pensados para los más pequeños.
1. Globos para no perder al niño
Perder a los niños es uno de los miedos más comunes. En especial, en sitios con grandes aglomeraciones de personas, como el supermercado o los parques.
Existen soluciones sencillas para apaciguar ese temor, como vestir a los pequeños con prendas llamativas y anudar un globo a su muñeca. Estos objetos permitirán distinguir al pequeño entre la multitud.
2. Pulseras antiextravío para niño
Otros métodos permiten, además, que en caso de extravío de un menor, otros adultos les lleven con quien corresponda. La forma más sencilla de lograrlo es usar una pulsera, en la que figure la información de contacto de los padres.
Las pulseras para niños deben ser de materiales resistentes, como vinilo o silicona
La pulsera debe estar confeccionada con materiales resistentes, como plástico, vinilo, silicona o incluso cuero. Los niños son muy activos y no es extraño que una pulsera endeble se rompa y pierda durante sus juegos. Conviene, además, que estén fabricadas de una única pieza. Esto es relevante, sobre todo para los menores de tres años, con el fin de impedir que se traguen trozos pequeños.
En el mercado hay numerosas propuestas de pulseras para niños, utilizadas para evitar o reducir los peligrosos y angustiosos extravíos. Estas son algunas de las propuestas más interesantes: Barcelove,Por si me pierdo, VIP®Band, Infoband y Keeps me Safe.
3. Tecnología para evitar que el bebé se pierda
El último grito tecnológico son, sin embargo, las pulseras que incluyen un código QR para encontrar a los niños perdidos. El código QR funciona de un modo similar al código de barras de los productos comerciales y está muy difundido entre los usuarios de teléfonos inteligentes o smartphones.
¿Cómo funcionan? Basta con acercar el móvil al código de la pulsera para obtener la información de contacto de los padres del niño.
La pulsera Ayo help reúne estas características. Su precio es de 9,90 euros por unidad.
4. Chapas colgantes para pequeños
Las pulseras no son el único artilugio para encontrar a los niños perdidos. Otra posibilidad es optar por chapas colgantes, diseñadas en acero inoxidable para que los datos no se borren. Incluyen una cobertura plástica para evitar los bordes afilados. Además, la cadena metálica que la acompaña se rompe si se tira con fuerza, para impedir riesgos de asfixia.
Un ejemplo de estas chapas son las desarrolladas por la empresa Bienpegado, cuyo coste es de 8,25 euros por artículo.
5. Tatuajes temporales para bebés
Los tatuajes temporales permiten, además, anotar alergias importantesSi es difícil que los pequeños se despeguen de pulseras y chapas colgantes, hay algo aún más complicado: los tatuajes. Y es que hay empresas que comercializan tatuajes temporales para niños, que duran varios días. Permiten que los menores lleven la información de contacto, sobre alergias o cualquier otra clase de datos importantes pegada en la propia piel.
Algunas propuestas son Peque Seguro, cuyos paquetes de 24 unidades cuestan 19,5 euros, o Fun choices, que venden 15 unidades por 10,95 euros.
5. GPS contra los extravíos infantiles
La tecnología hace su aporte no solo a través de los códigos QR, sino también con dispositivos más sofisticados, como los sistemas de localizadores por GPS.
Estos productos constan de dos partes: un reloj o emisor de señal y un receptor, que permite conocer en tiempo real la ubicación del pequeño. Existen varios modelos, como GTU 10 Tracker, desde 167 euros, o Child Locator, que vale 379 euros.
Una propuesta desarrollada en España es Pikavú. Incluye un reloj resistente al agua y a los golpes. Entre otras cualidades, posee un botón que, si se aprieta durante cinco segundos, activa una alarma en el receptor. Lo negativo es su precio: un equipo cuesta 1.015 euros.