Las alteraciones hormonales durante el embarazo implican riesgos para la salud bucal de la gestante y, por lo tanto, peligros para el bebé, como un parto prematuro. Este artículo explica por qué la gingivitis y las caries son más frecuentes en la embarazada y ofrece consejos para prevenir los problemas dentales mientras se espera a un hijo.
Gingivitis y caries, problemas más frecuentes durante el embarazo
Durante el embarazo crecen los problemas en los dientes. «Se producen cambios hormonales que afectan a los vasos sanguíneos de las encías, al funcionamiento de las células gingivales, a las características de las bacterias de la placa bacteriana y al sistema inmune de la boca», afirma Nuria Vallcorba, presidenta de la Sociedad Española de Periodoncia y Osteointegración.
El principal problema bucal que padece la mujer durante el embarazo se conoce como gingivitis gravídica (inflamación de las encías), un problema que «puede afectar a más de 36% de las gestantes si ya lo han padecido antes de la gestación», explica Vallcorba. Es habitual que se presente entre el cuarto y el octavo mes de embarazo y sus consecuencias pueden ser nefastas, ya que puede afectar a la estructura ósea y provocar la pérdida de piezas dentales.
La gingivitis y las caries crecen durante el embarazo
La gingivitis del embarazo se caracteriza por la inflamación y el sangrado frecuente de las encías. En general, se produce un engrosamiento del margen de la encía y se incrementa el volumen de las zonas interdentales.
Algunos estudios revelan también la prevalencia de otras lesiones comunes en las embarazadas, como las caries y las erosiones dentales. Aunque estos problemas, más que derivarse de los cambios fisiológicos del embarazo, se relacionan más con una alteración en los hábitos de higiene bucal en este periodo.
Cuidar la salud bucal de la embarazada, cuanto antes
La forma más idónea de prevenir la gingivitis gravídica y otros problemas bucales durante este tiempo es «acudir al dentista antes de quedarse embarazada«, señala Vallcorba. «Cuando se inicia una gestación sin inflamación gingival y se sigue una higiene correcta, los casos de gingivitis se reducen al 1%», apunta.
La prevención e higiene bucal de la gestante reduce mucho sus problemas bucales
Lo idóneo es realizar los tratamientos bucales necesarios antes del embarazo. No obstante, si la mujer queda en estado y no ha realizado los controles dentales precisos, «también puede acudir al dentista o periodoncista durante la gestación», añade la doctora.
Vallcorba puntualiza que el segundo trimestre del embarazo es el más seguro para intervenir. En estos casos, el especialista en salud bucal y el ginecólogo deberán determinar si hay algún tipo de limitación para tratar los problemas dentales.
Consejos de higiene bucal en la gestación
La futura mamá debe cuidar su higiene bucal de un modo muy especial. Estos son algunos de los consejos de los especialistas:
Realizar un correcto cepillado y cuidar la higiene interdental (con seda o cepillos interdentales) de manera regular.
Acudir al dentista y periodoncista para detectar posibles enfermedades bucales y tratarlas si fuera necesario. Es aconsejable una limpieza dental profesional.
Mantener una dieta equilibrada durante el embarazo. Es recomendable controlar el consumo limitado de azúcares (dulces, galletas, refrescos, etc.).
Consultar con el especialista la conveniencia de realizar enjuagues de flúor durante el embarazo o clorhexidina y de masticar chicles de xilitol.
Mantener pautas y hábitos que eviten náuseas y vómitos durante el embarazo, ya que dañan los dientes.
Los problemas dentales durante el embarazo no solo inciden en la salud bucal de la mujer. También pueden perjudicar el desarrollo de la gestación.
Según un informe elaborado por la Sociedad Española de Periodoncia y Osteointegración, la mala salud periodontal de la madre duplica el riesgo de sufrir un parto prematuro.