Los cursos de idiomas en familia son una opción en alza. Los padres tienen la oportunidad de trasladarse con sus hijos, a la vez que disfrutan de un país extranjero y aprenden o perfeccionan la lengua nativa. Para estos casos, destinos tradicionales como Londres, París y Berlín son siempre una tentación, pero no son los únicos. Las termas romanas de Bath en Inglaterra, la bahía de Galway en Irlanda, las playas de Niza en Francia, las montañas de Montreaux en Suiza y los actos culturales de Heidelberg en Alemania son idóneos para el mismo fin. Estos son los cinco destinos propuestos para viajar en familia y aprender inglés, francés o alemán durante el verano, tanto si se contrata un programa para familias en una agencia de idiomas como si se planifica por cuenta propia para reducir costes.
La Asociación Española de Promotores de Cursos en el Extranjero (ASEPROCE) destaca los cursos de idiomas en familia como una opción «para que padres e hijos puedan combinar vacaciones en otros países con el aprendizaje o el perfeccionamiento de idiomas». Es una alternativa a las vacaciones convencionales, que permite a padres e hijos un mejor aprovechamiento del tiempo.
Un estudio indica que cada vez más familias pasan sus vacaciones en un país extranjero donde aprovechan para aprender un idioma
Cada vez más escuelas de idiomas ofertan estos paquetes o personalizan las estancias y se encargan de reservar tanto la plaza en un centro de estudios, con clases adaptadas a las edades y necesidades de cada miembro, como la estancia en casa de una familia nativa, apartamento u otro alojamiento que hayan elegido padres e hijos. Pero un aspecto fundamental es el destino. Escoger el lugar idóneo donde se pasará el verano es clave para conseguir que toda la familia se sienta cómoda y que los pequeños no vean las horas de clase como una obligación.
Un estudio de ESL Idiomas en el Extranjero señala un aumento cercano al 45% en el número de familias que pasan sus vacaciones en un país extranjero donde aprovechan para aprender un idioma. «Los padres, porque tienen que mejorarlo para su desarrollo profesional, los hijos porque es el momento para asentar unas buenas bases en su proceso de aprendizaje», subraya. Según las particularidades de cada familia, viajan ambos progenitores con un hijo o varios o bien tan solo se desplaza uno de los padres.
1. Aprender inglés en Bath (Inglaterra)
El inglés es el idioma estrella. Cada año repite como ganador de una quiniela en la que no admite rival. Pero al destino le salen varios competidores. La ciudad cosmopolita de Londres es una de las preferidas entre los estudiantes, aunque para aprender inglés en familia, otros lugares pueden resultar más acogedores que esta gran urbe.
Es el caso de Bath, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. No solo destaca el atractivo de la ciudad, sino también los parajes que la rodean. Es un lugar tranquilo para la familia, pero visitado por turistas y estudiantes en verano. Y es que cuenta con un buen número de escuelas de idiomas. En el tiempo de ocio se puede gozar de las termas romanas, acercarse a visitar Londres, viajar a la costa o disfrutar del entorno natural.
2. Aprender inglés en Galway (Irlanda)
La costa de Galway es una de las más atractivas. La urbe destaca por su ambiente estudiantil, museos y castillos y su cercanía a los Acantilados de Moher y las Islas de Aran. La oferta de escuelas de inglés es extensa y adaptada a todas las edades, en ocasiones a partir de cuatro años, mientras que las actividades de ocio quedan cubiertas tanto en la ciudad como en el entorno.
Galway ofrece opciones culturales diversas. Es un sitio para disfrutar con los hijos del arte y la cultura, así como de propuestas al aire libre. El Ayuntamiento de Galway reúne en su web información sobre los actos culturales organizados en la ciudad.
3. Aprender francés en Niza (Francia)
Las playas de Niza son el lugar idóneo para relajarse después de una semana intensa de estudio. Museos, calles comerciales, rincones acogedores y actos culturales conforman otras alternativas. Esta ciudad de la costa azul francesa propone a las familias cursos adaptados para cada miembro y programas especiales para padres con hijos adolescentes.
4. Aprender francés en Montreaux (Suiza)
Montreaux, al borde del lago Lemán en Suiza, se suma a la oferta de destinos familiares donde todos los miembros pueden aprovechar para estudiar y descansar. Algunos cursos solo se ofrecen para padres con hijos a partir de 14 años. Como las anteriores ciudades, destaca por combinar tranquilidad con opciones de ocio cultural y al aire libre, además de centros de idiomas.
Este emplazamiento permite que los estudiantes disfruten de un amplio abanico de actividades con el resto de compañeros u organizar excursiones durante el fin de semana. Se puede aprovechar para contratar salidas en grupo con personas nativas, de manera que padres e hijos practiquen el idioma en el tiempo libre.
5. Aprender alemán en Heidelberg (Alemania)
Heidelberg es uno de los lugares por excelencia para estudiar alemán. Aunque está a varias horas de Berlín, un importante atractivo para visitar el país, destaca por una extensa oferta de cursos y un entorno natural de gran belleza. Dos aspectos muy interesantes a su favor.
Conocer los actos culturales de la ciudad posibilita disfrutarla. Hay casi un centenar previstos cada día, incluidas las exposiciones de arte, que permiten interactuar con la población local y practicar el idioma.
Cuando varios miembros de una misma familia se matriculan en un curso de idiomas en el extranjero, algunas agencias aplican descuentos sobre el precio final. A partir de dos personas, la rebaja es mayor cuantos más miembros se matriculen.
No obstante, se puede abaratar el coste si se organiza el viaje sin intermediarios. Las propias familias pueden buscar por su cuenta una academia y un lugar donde alojarse, aunque es necesario ser consciente de que la responsabilidad de los servicios contratados será de la familia contratante. Por ello, no solo conviene organizar la estancia con tiempo, sino guardar todos los contratos.
Dónde buscar curso
La Asociación Española de Promotores de Cursos en el Extranjero cuenta con un total de 72 organizaciones asociadas. Todas ellas se pueden consultar en este listado. Es importante conocer sus ofertas para comparar precios y servicios.
Otra opción es consultar directamente con las escuelas de idiomas en el extranjero. La mayoría cuentan con páginas web donde figuran los datos de contacto e información acerca de sus cursos. Es fácil consultarles mediante un correo electrónico y revisar los foros y otros espacios de participación, para conocer las opiniones de otros usuarios.
Dónde buscar alojamiento
El alojamiento de la familia es el segundo factor que implica el mayor gasto de la estancia. Sin embargo, hay alternativas. En función del lugar donde se viaje, es posible desplazarse con una caravana propia y reservar plaza en un camping para toda la familia. El ahorro en este caso será importante.
Cabe la posibilidad de alquilar un piso o apartamento o, incluso, es posible intercambiar la casa, una opción que permite contar con una vivienda “propia” en el lugar de destino y que reduce los gastos de manera considerable.