Consejos prácticos para hacer una ensalada de pasta perfecta
🍴 Elegir la pasta
Para elaborar una ensalada, las pastas más recomendadas son: las «huecas» (macarrones, caracolillos o coditos), las largas (tallarines, cintas y espaguetis) o las más pequeñas, como los lacitos e incluso los fideos pequeños.
🍴 Tiempo de cocción y conservación
La cocción idónea es «al dente«, es decir, es importante dejar la pasta un pelín dura en su interior para que no se reblandezca enseguida. Una vez cocida, se debe refrescar bajo el chorro de agua fría y escurrir. Luego se puede guardar en la nevera con un poquito de aceite, en un táper cerrado de manera hermética. Incluso en el frigo, no conviene conservar la pasta hecha durante más de 24 horas.
🍴 El momento de aliñar
Si haces la ensalada para llevar (tanto al parque como a la playa), puedes mezclar la pasta con los ingredientes elegidos, pero nunca aliñar hasta el momento de comer ni acompañar con elementos que contengan mucha agua. De ese modo, la pasta no quedará blanda.
💡 Si llevas el aliño en sobrecitos individuales o en un recipiente aparte, y mezclas justo antes de servir, la ensalada quedará perfecta.
🍴 Transportar la ensalada
También conviene transportar la ensalada en un recipiente hermético —si es posible, en una nevera portátil o bolsa termo— para que el calor no afecte ni a la calidad de la pasta ni a los ingredientes que la acompañan.
Ensaladas de pasta: seis opciones para degustar
En las ensaladas de pasta hay muchas maneras de alcanzar la originalidad.
- El tipo de pasta es una de ellas, puesto que en la actualidad es posible encontrar gran cantidad de formas y colores capaces de realzar el aspecto de nuestra ensalada.
- Los ingredientes con los que combinar también dan mucho juego: verduras crudas o semicocinadas, fiambres, huevos cocidos, sobras de asados o pollo, pescado o marisco preparado a la plancha, conservas…
- Las salsas y aliños pueden marcar la diferencia: no es lo mismo una vinagreta (simple o guarnecida con encurtidos o frutas) que una salsa derivada de la mayonesa, una de queso o las clásicas salsas verde y de tomate.
Aquí van algunas sugerencias para probar (y disfrutar):
1. Ensalada de tallarines con langostinos
- Cuece los tallarines en agua hirviendo con sal durante cuatro minutos. Cuando estén cocidos, refréscalos bajo el chorro de agua fría del grifo, escurre, humecta con aceite de oliva y reserva.
- Pela y trocea los langostinos cocidos y mézclalos con los tallarines. También añade unas hojas de lechuga lavadas y troceadas.
- Haz una salsa vinagreta (con aceite de oliva, un ajo muy machacado, el vinagre y la mayonesa) y mezcla hasta conseguir una consistencia cremosa y bien ligada.
- A continuación, aliña el conjunto preparado y sirve enseguida para que el vinagre no estropee las texturas de los alimentos.
2. Ensalada de pasta, verduras y gambas salteadas con salsa rosa
- Cuece la pasta en una cazuela con agua hirviendo y sal durante ocho minutos. Una vez cocida, escurre, refresca bajo el agua fría y vuelve a escurrir. Reserva la pasta untada con un poco de aceite.
- Por otro lado, en una sartén con aceite de oliva dora los dientes de ajo pelados y cortados en láminas. Antes de que se doren en exceso, agrega las verduras congeladas y saltea durante ocho minutos.
- Añade las colas de gambas peladas y saltea el conjunto durante un minuto más. Pon a punto de sal y reserva.
- Elabora la salsa rosa con la mezcla de mayonesa, kétchup, zumo de naranja y brandy.
- Para servir, coloca una base del salteado de verduras y gambas y, sobre ella, la pasta templada. Por último, vierte la salsa rosa por encima.
3. Ensalada de pasta con pollo, aguacate y nueces
- Cuece la pasta en agua hirviendo con una pizca de sal durante 10 minutos, escurre, refresca y escurre de nuevo.
- Aliña con aceite de oliva, agrega los dientes de ajo muy picados, los tomates pelados y troceados y el aguacate pelado y troceado.
- Sobre esta pasta coloca las tiras de pechuga de pollo asadas, más las nueces troceadas.
- Aliña el conjunto con una vinagreta de aceite de oliva, vinagre balsámico y sal.
4. Ensalada de pasta y lechugas con sardinas en conserva
- Pon la pasta en agua hirviendo con sal y, una vez cocida, escúrrela, pásala por agua fría, de nuevo escurre y reserva apenas embadurnada con un poco de aceite de oliva.
- Coloca la lechuga en una fuente; encima, la pasta cocida; y sobre ella, las sardinas en conserva.
- Por último, mezcla el aceite de oliva con vinagre balsámico y una pizca de sal.
- Aliña la ensalada con la vinagreta balsámica resultante y con unos arándanos previamente lavados y termina espolvoreando por encima un poco perejil troceado.
5. Ensalada de pasta al curry
- Pon la pasta a cocer en agua hirviendo con un poco de sal y una cucharada de aceite.
- Mientras se cocina, mezcla el curry, el yogur, el aceite, el vinagre, el ajo picado, la sal y la pimienta en una ensaladera.
- Saca la pasta del fuego, escurre y añádela a la ensaladera caliente (sin refrescar bajo el grifo). Deja enfriar en el bol.
- Trocea la manzana y vierte el zumo de limón. Agrégalo junto con el apio picado a la ensaladera y mezcla todo.
- Justo antes de servir la ensalada, corta un aguacate en rodajas y rocía con limón. Adorna la ensalada con el aguacate y decora con un poco de curry por encima
6. Ensalada de pasta con salmón ahumado
- Hierve la pasta con agua y sal. Una vez cocida, escúrrela, pásala por agua fría, escurre de nuevo y reserva (apenas embadurnada con un poco de aceite de oliva).
- Cuece las judías verdes en agua con sal para que queden «al dente». Cuando estén listas, escúrrelas y fríelas en una sartén con un poco de aceite.
- Pon la lechuga y las judías verdes en una fuente, coloca encima la pasta cocida y sobre ella el salmón.
- Por último, pica cebollino o perejil, mézclalo con aceite de oliva y vierte por encima de la ensalada.
- Termina espolvoreando por encima un poco de sal y pimienta blanca recién molida.