Las revelaciones del llamado caso Snowden, respecto al espionaje masivo de comunicaciones a través de Internet por parte de Estados Unidos, ha alertado a muchos usuarios sobre las posibles implicaciones para su propia privacidad de utilizar plataformas de las grandes empresas digitales a la hora de guardar sus datos. Estos servicios cuentan con sistemas de cifrado de archivos y correos que previenen frente a estafadores y otros ciberdelincuentes. Pero desincentiva su uso la posibilidad de que en algún momento los documentos sean leídos por las estructuras de vigilancia gubernamentales, como el programa PRISM de la NSA. Además, la práctica legal de las grandes compañías de ceder o emplear parte de nuestros datos para estudios de mercado y publicidad es incómoda para muchas personas, por lo que prefieren mantener un anonimato absoluto sobre sus costumbres. Ante esto, se pueden tomar algunas medidas de seguridad y privacidad adicionales para evitar ser espiado al subir archivos a la “nube”, como usar una VPN (Virtual Private Network) o servidores Proxy y, sobre todo, cifrar los documentos que se almacenarán en ellos antes de hacerlo. Otra opción es construirse una propia “nube” privada, para lo cual hay diversas alternativas comerciales, que se detallan a continuación.
Younity y Lima, dos novedades interesantes
Younity es una aplicación para iOS que permite sincronizar archivos alojados en ordenadores
Younity es una aplicación para iOS que permite sincronizar archivos alojados en ordenadores basados en los sistemas operativos Windows y Mac OS X. Una vez instalada, hay que indicar qué carpeta del disco duro se utilizará para acceder de forma remota. De este modo, los usuarios pueden entrar a sus archivos del escritorio desde su teléfono móvil o tableta, así como compartirlos con otros, pero nunca empleando servidores de empresas terceras que escapen a su control. También permite tener acceso a las listas de reproducción de música de iTunes, ver vídeos en streaming o las galerías de imágenes guardadas en los diferentes ordenadores del usuario.
Lima se llama la propuesta de hardware financiada con crowdfunding que consta de un pequeño dispositivo USB al que se conectan uno o varios discos duros, o incluso un pendrive, para convertirlos en un servicio unificado de almacenamiento en la «nube». De esta forma, los usuarios pueden sincronizar los archivos desde cualquier aparato, a través de Internet o dentro de la red local. Lima utiliza una VPN interna para dotar de mayor seguridad a la conexión entre los dispositivos y el espacio de almacenamiento.
Utilizar servidores NAS
DNS-327L materializa la idea del fabricante D-Link para crear una «nube» privada de alojamiento de archivos. Se basa en un servidor NAS pensado hacer copias de seguridad y guardar y compartir archivos entre una red de ordenadores. Es compatible con el servicio en la «nube» de D-Link denominado Mydlink. De esta manera, se puede acceder a los archivos guardados en los discos duros del NAS de forma remota, a través de diferentes aplicaciones para dispositivos móviles, o mediante el navegador web. Este NAS presenta dos bahías para dos discos duros de 3,5 pulgadas, que deben ser adquiridos de forma independiente. Su precio estimado es de 200 euros.
Como una opción similar figura el NAS de Western Digital llamado My Cloud. Este completo NAS incluye el disco duro. De este modo, se comercializa en tres versiones según su capacidad: 2, 3 y 4 Terabytes, respectivamente. My Cloud cuenta con aplicaciones para ordenadores (Windows y Mac OS X), así como para tabletas y teléfonos móviles basados en iOS y Android. Permite realizar multitud de funciones, desde un acceso remoto a archivos, a trabajar como gestor de los contenidos multimedia dentro de la red. También tiene una opción para hacer copias de seguridad de los ordenadores de la red doméstica. Cuesta entre los 150 y los 300 euros en función de la capacidad de almacenamiento.
OwnCloud y Seafile, sistemas operativos para servidores
OwnCloud consiste en un interesante proyecto de sistema operativo de servidor para compartir y sincronizar archivos en una «nube» privada. Para ello, se necesita contar con un servidor propio, o hosting externo, donde alojar los archivos. En primer lugar, se debe instalar la versión del servidor y después utilizar algunas de las aplicaciones disponibles tanto para ordenadores (Windows, Mac OS X y Linux) como para aparatos portátiles basados en Android e iOS. No solo destaca por sus características como gestor de archivos de forma remota. También añade algunas funciones para crear grupos de trabajo y para la gestión de proyectos. De esta manera, los usuarios pueden disponer de un calendario sincronizado, galerías de imágenes, tareas, control de versiones de archivos o incluso acceso a almacenamiento externo a través de servicios en la «nube» de terceros.
Seafile es una solución para compartir archivos y sincronizarlos entre diferentes dispositivos. Funciona mediante la instalación de aplicaciones en los aparatos del usuario, ya sean ordenadores (Windows, Mac OS X y Linux) o dispositivos portátiles basados en iOS o Android. Pero es necesario contar con un servidor propio donde alojar los archivos, o utilizar los servicios de Amazon a través de Amazon Web Services. También permite instalar la aplicación servidor en una Raspberry Pi, un ordenador de menos de 50 euros.