La contaminación del aire provoca cáncer de pulmón. Así de claro lo tiene la Organización Mundial de la Salud (OMS), que publicaba en fechas recientes un informe con “pruebas suficientes” para afirmarlo. Otros estudios, e instituciones como la Agencia Europea del Medio Ambiente (AEMA), se posicionan de forma similar sobre la importancia del problema y la necesidad de combatirlo para evitar miles de muertos, pérdidas millonarias y daños a los entornos naturales. Este artículo aborda que la contaminación del aíre causa cáncer según la OMS y explica por qué Europa debería ser más exigente con la polución y cómo se pueden reducir sus efectos.
OMS: la contaminación del aire causa cáncer
La Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer (IARC) es una división de la OMS responsable de revisar las sustancias que causan dicha enfermedad y en qué medida lo hacen. Sus responsables han incluido recientemente la contaminación del aire en el Grupo 1 de su escala, el nivel más alto reservado a las sustancias sobre las que hay certeza científica de que son cancerígenas. Se trata de la primera vez que esta institución estudia y clasifica la contaminación en general.
La contaminación causó en 2010 un total de 223.000 muertes por cáncer de pulmón a nivel mundial, según la OMSLa IARC publicaba hace poco en la revista científica ‘The Lancet Oncology‘ un estudio monográfico sobre la contaminación del aire y sus efectos cancerígenos. El trabajo, que revisa más de mil artículos científicos, afirma que en 2010 la contaminación causó 223.000 muertes por cáncer de pulmón a nivel mundial.
Los expertos de esta división de la OMS aseguran que las conclusiones son válidas para todas las regiones del mundo, aunque reconocen que la composición y los niveles varían «radicalmente» entre unas zonas y otras. La IARC, además de afirmar que hay «pruebas suficientes» de que la contaminación provoca cáncer de pulmón, también sostiene que hay una «asociación positiva» con un mayor riesgo de sufrir cáncer de vejiga.
Piedad Martín-Olmedo, profesora de la Escuela Andaluza de Salud Pública (EASP), recuerda que la OMS cifra el impacto de la contaminación atmosférica en más de dos millones de defunciones prematuras al año. Según esta experta, que ha participado en un innovador estudio europeo sobre este problema, la exposición más importante y extensa se produce en las ciudades con una población superior a 50.000 habitantes.
Las emisiones contaminantes más relevantes son, detalla Martín-Olmedo, el tráfico rodado (hasta en un 75%), las emisiones de calefacciones y cocinas, actividades como la construcción y demolición y, de forma más puntual y localizadas, emisiones de buques, actividades portuarias o de aeropuertos, entre otras.
El estudio de la IARC no es el único de carácter científico que alerta sobre los riesgos de respirar un aire sin la calidad suficiente. En agosto, la revista ‘The Lancet Oncology‘ una vez más publicaba un amplio estudio europeo que concluía que la contaminación atmosférica a largo plazo también puede provocar adenocarcinoma pulmonar. Sus autores proponían también incluir la polución atmosférica entre las causas del cáncer de pulmón.
Europa debería ser más exigente con la contaminación
La Agencia Europea del Medio Ambiente (AEMA) ha publicado diversos estudios sobre contaminación del aire con una de cal y otra de arena para los Estados miembros de la Unión Europea (UE). Sus responsables reconocen las mejoras de los últimos años, pero destacan la necesidad de mayores esfuerzos. La AEMA calcula que la contaminación atmosférica reduce la esperanza de vida humana en unos dos años en las ciudades y regiones más contaminadas y provoca daños de cientos de millones de euros.
Los expertos de la AEMA subrayan que los límites legales de emisiones contaminantes en la UE son menos exigentes que los recomendados por la OMS. La Directiva comunitaria en materia de contaminación del aire es de 2001, y se marcaba unos objetivos para 2010. Aunque, en líneas generales, la UE parece haber cumplido varios de ellos, la AEMA recomienda incorporar los últimos descubrimientos científicos.
La Comisión Europea (CE) revisa en la actualidad la política de la UE en materia de calidad del aire. Entre otras iniciativas, debería proponer una revisión de la directiva antes de que acabe 2013 en la que se deberían fijar nuevos objetivos para 2020.
Contaminación del aire: cómo reducir sus efectos
Los expertos en contaminación del aire señalan varias medidas necesarias para evitar o al menos reducir sus efectos:
- Utilizar el coche lo menos posible, ya que es su principal causante. La promoción del transporte público o de hábitos de vida más sostenibles, así como la apuesta por tecnologías limpias, son necesarias.
- Realizar más estudios científicos para conocer el origen y alcance real de las emisiones contaminantes, y establecer límites legales obligatorios acordes a los mismos.
- Ofrecer información actualizada, comprensible y de calidad a los ciudadanos sobre las emisiones contaminantes.
- Evitar respirar en lo posible el aire de las zonas más contaminadas. Hacer deporte al lado de calles con mucho tráfico puede ser más dañino que beneficioso.