Las fiestas suelen ser el espacio de los excesos, y la de Halloween no es la excepción. En la celebración de noche de brujas, los niños pueden llegar a comer demasiados dulces. Y si bien no conviene prohibir que, de manera ocasional, los consuman, mucho mejor si se pueden sustituir las chuches y la bollería industrial por productos más nutritivos y saludables. A continuación se ofrecen cinco dulces saludables para ofrecer a los niños este Halloween: macedonias de frutas, gelatinas, garrapiñadas, barritas de cereales y zumos naturales.
Dulces saludables para niños en Halloween
Los dulces de Halloween para niños pueden prepararse en casa, con recetas más saludables
Los dulces son una de las tradiciones más características de la fiesta de Halloween. Esto representa un riesgo, ya que el consumo excesivo de chuches y zumos provoca caries y propicia la obesidad infantil. Por eso, ocupan el lugar más alto -que indica que se deben comer sólo ocasionalmente- en la pirámide de la nutrición infantil.
Es difícil prohibir los dulces. Pero sí, como recomienda el Decálogo de la Alimentación Infantil, desarrollado por la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria, se deben tomar «con moderación».
A continuación se ofrecen algunas propuestas para realizar esa sustitución y ofrecer dulces más saludables a los niños en la noche de brujas.
1. Dulces sanos para Halloween: macedonias de frutas
Se dice que las frutas son las chuches de la naturaleza. Y, como tales, lo mejor es aprovecharlas. Para que las frutas resulten más atractivas para los niños, conviene servirlas con una presentación más vistosa. Entonces, en lugar de dar una fruta entera, lo más apropiado es elaborar macedonias de frutas frescas (naranja, manzana, sandía, melón, mandarina, kiwi, etc.), mezclas coloridas que entran por los ojos de los más pequeños.
La macedonia se puede preparar según la receta tradicional con frutas frescas o alguna de sus variantes: con yogur, con cerezas, gelatinizada con agar-agar, de frutas tropicales, etc.
Una alternativa que hace todavía más dulce el preparado es servir los trozos de frutas en almíbar. Si bien los melocotones y las piñas son las que con mayor frecuencia se consumen de esta forma, cualquier fruta se puede conservar en almíbar. Y esto se puede aprovechar en una ocasión especial como la de Halloween.
2. Gelatinas infantiles para Halloween
. La gelatina contiene proteínas, aunque su aporte nutritivo no sea considerable. Sin embargo, resultan un buen reemplazo para las chuches y la bollería industrial. Y si se desea darle mayor valor nutritivo, es posible prepararla con yogur, leche o zumo, o incluir trozos de fruta en su preparación.
Para Halloween, la recomendación es utilizar para su elaboración moldes con motivos relacionados con las fechas: con forma de fantasmas, brujas, murciélagos, etc. Si bien se pueden utilizar muchos colores distintos, el que no podrá faltar es el naranja, para que haga juego con las calabazas, el símbolo por excelencia de esta celebración.
3. Garrapiñadas monstruosas para niños
A los niños les hace mucho ilusión hacer y comer en casa productos que están acostumbrados a comprar fuera. Con las garrapiñadas se les puede ofrecer esa posibilidad y, además, la de que coman en Halloween dulces elaborados a partir de frutos secos y otros productos naturales y muy nutritivos.
Se pueden emplear almendras, avellanas, cacahuetes e incluso nueces y otros frutos secos. La receta también requiere de azúcar, para crear el caramelo con el que se embadurna el fruto. Pero, más allá de eso, los valores nutritivos del fruto se mantienen.
4. Barritas de cereales
Con las barritas energéticas ocurre algo parecido a lo que pasa con las garrapiñadas. Ofrecen la ventaja de que, además de frutos secos, en su elaboración se pueden emplear semillas (como pipas de girasol o de calabaza, semillas de sésamo, amaranto, etc.) y frutas desecadas, como ciruelas, orejones y uvas pasas.
Se mezclan con melaza de cereales a alta temperatura, se hornea y se deja secar y luego se sirve cortada en trocitos. Además de sabrosas, estas barritas tienen un gran contenido energético.
5. Zumos naturales para niños en Halloween
Muchos refrescos industriales acarrean perjuicios para los niños: desde las consabidas caries y riesgo de sobrepeso hasta trastornos en el sueño y problemas de conducta y de atención.
Los zumos son un buen sustituto para estas bebidas, sobre todo en ocasiones como la fiesta de Halloween, en que los niños suelen beber mucho líquido. Aunque también contienen azúcares (responsables de las caries y el riesgo de sobrepeso), los zumos naturales son mucho más saludables y conservan algunos de los nutrientes de las frutas de las que proceden.
Hay que recordar las recomendaciones de la Asociación Española de Pediatría: no es bueno tomar zumo para la sed, entre horas, para eso lo mejor es el agua. Y el valor nutritivo de comer una fruta en trozos es mucho mayor que el de beber nada más que su zumo.