¿Ganar dinero por ponerse una camiseta o hacerse un tatuaje? ¡Es posible! ¿Cómo? Convirtiéndose en un original soporte publicitario para una marca. Ya hay gente que lo hace y, en ocasiones, sale muy rentable. En general, que las empresas paguen por llevar publicidad en una moto o un coche -e incluso en la fachada de un edificio– resulta bastante sencillo, pues es fácil llegar a las compañías que requieren de este servicio. En el resto de opciones, la iniciativa la debe tomar la propia persona y ofrecerse a empresas que deseen publicidad o bien contactar con una agencia y comunicar la disponibilidad que se tiene si es que desean hacer publicidad en soportes innovadores como el propio cuerpo. En este artículo se explican las posibilidades más innovadoras que existen para ofrecerse como soporte publicitario.
1. Tatuarse publicidad
Frente, piernas, brazos, espalda, torso… ¡incluso una buena calva! Cualquier zona del cuerpo puede convertirse en soporte publicitario, siempre que quien luzca el anuncio sea una persona extrovertida y que alterne con cierta frecuencia en lugares llenos de gente. Así, en verano, el cuerpo de un socorrista es un espacio muy interesante para anunciar un gimnasio, como también la espalda de una chica con un precioso moreno lo es para dar a conocer una crema solar. ¿Cómo? Tatuándose la publicidad (de manera permanente o temporal).
En España, el publicista argentino Fred Bosch se tatuó un código QR en su brazo para ofrecerlo como soporte publicitario a las compañías que quisieran que sus clientes accedieran a su web o cualquier contenido multimedia escaneando con sus smartphones el tatuaje. El tatuaje recibió miles de descargas y se subastó en eBay con el eslogan «Anúnciate en el brazo de Fred».
Hay empresas que pagan por llevar un tatuaje temporal en un lugar que llame la atención, como unas aerolíneas neozelandesas que dieron 467 euros a quien llevara su logo en la cabeza rapada. En Estados Unidos, una inmobiliaria de Nueva York ofrece un aumento de sueldo del 15% a cada trabajador que se tatúe su logotipo: el empleado elige el sitio y el tamaño del tatuaje y la firma corre con los gastos.
2. Llevar una camiseta con anuncios
No muy explotada en España, la idea de Jason Sadler -que con menos de 30 años llegó a facturar unos 85.000 dólares al año- no puede ser más simple. Pero, a la vez, es ingeniosa y muy rentable. Para llevarla a la práctica solo hay que ofrecerse vestir un polo o camiseta con la publicidad de empresas o de quien lo desee. Aunque su página web -que funcionó entre 2006 y 2013- ya no está disponible, se trata de un planteamiento que es posible imitar. A buen seguro será fácil encontrar patrocinadores deseosos de insertar anuncios en las camisetas, sobre todo en las de jóvenes, estudiantes, etc.
3. Anuncios en la fachada de casa
La empresa estadounidense Brainiacs from Mars ofrece a los propietarios de viviendas unifamiliares pagarles la hipoteca mensual a cambio de convertir su casa en un soporte publicitario.
En España no se ha llegado aún a ese extremo, pero sí es corriente que la fachada del edificio, o la azotea, se transforme en un gran panel publicitario. Para poder sacar provecho de esta idea hay que tener el voto afirmativo de tres de cada cinco vecinos. También conviene tener en cuenta que este beneficio económico hay que declararlo a Hacienda.
4. Publicidad en la moto y el coche
¿Entre 100 y 300 euros al mes por llevar publicidad en el coche? Depende de la empresa escogida -como www.marketmoving.es o www.serbecar.com– y de la campaña para la que se solicite, pero las tarifas rondan esos precios. Hay que cumplir una serie de kilómetros al mes y, en caso de no llegar, descontarán dinero; si se hace más, se cobra lo mismo. Los automóviles más solicitados para publicidad son los que tienen una imagen joven, fresca y eficiente, además de menos de cinco años de antigüedad. Caso aparte son los clásicos, muy atractivos para campañas concretas.
Respecto a las motos, por unos 180 euros al trimestre se puede anunciar una marca en una motocicleta. Hay dos modelos de publicidad, según la cilindrada (de 50cc y 125cc).
5. Publicidad en la bici
Otra idea que se puede importar, que aún no se da en España pero sí en otros países como Francia o Chile, es ganar un dinero extra pedaleando.
Quien se anime en Santiago de Chile a recorrer unos nueve kilómetros diarios en bici puede contactar con Bicibilidad.cl; para conseguir dinero solo deberá llevar publicidad en sus ruedas (en discos fijos, para que la publicidad no se mueva).
En Francia también es posible. En el país vecino se puede ganar hasta 200 euros mensuales por introducir publicidad en las ruedas. Sébastien Bourbousson ha creado la startup Écovélo para fomentar que la gente se mueva en bicicleta y que, de paso, consiga un beneficio para su bolsillo.
Las redes sociales merecen mención especial. En España muchos jóvenes se han hecho famosos por colgar vídeos en YouTube: Mangelrogel, Willyrex, Elrubius, Jpelirrojo… Los youtubers tienen miles de suscriptores en sus canales y consiguen numerosas visitas diarias. Por esta razón, hay empresas que patrocinan sus vídeos con un anuncio previo a cambio de una cuantía económica. Cuantas más suscripciones tenga el canal, más dinero se pagará. Las cantidades pueden oscilar desde 100 ¡hasta 6.000 euros!