Cocina fácil: patatas rellenas

Hace años, el objetivo de comer unas patatas rellenas era poder realizar una comida contundente y que saciase, con un producto barato y que estaba en la despensa de todas las casas. Se rellenaban de elementos simples como un poco de tocino, queso o restos de carne del cocido. En cambio, en la actualidad, las recetas de patatas rellenas han ido evolucionando hasta conseguir propuestas más diversas en cuanto a ingredientes y un poco más ligeras al añadir otra variedad de alimentos en su relleno, como pescados, marisco, vegetales y quesos bajos en calorías.

Aún así, sigue siendo un tipo de receta contundente en cuanto a calorías, por lo que lo mejor es prepararla de vez en cuando y casi siempre como plato único o como guarnición para compartir entre varios. Las siguientes son algunas ideas.

• Se cuecen cuatro patatas enteras con piel en una cazuela con agua durante unos 30 minutos. Se sacan de la cazuela, se les quita una tapa de la parte superior y se vacían en parte.
• Se mezcla la pulpa de patata con un tomate troceado, unos recortes de salmón ahumado y unos trocitos de piña natural, dos cucharadas de aceite de oliva y dos cucharadas de mayonesa.
• Se rellena la patata con esta mezcla y se disponen por encima unas tiras de salmón ahumado y trocitos de piña natural.
• Se decora con un poco de tomate troceado, mayonesa y una pizca de albahaca recién troceada.

• Se cuecen en agua con sal cuatro patatas enteras sin pelar.
• Una vez cocidas, se les da un corte en la parte superior y se vacían de forma parcial con ayuda de una cucharilla. Se reservan.
• Se pican en brunoise (picadito muy pequeño) media cebolla, un diente de ajo y medio pimiento verde y se pochan a fuego suave en una cazuela con dos cucharadas de aceite de oliva.
• Se añaden 300 gramos de carne de ternera picada, que se rehoga y, cuando cambie de color de cruda a cocinada, se moja con medio vaso de vino tinto.
• Cuando se evapore el vino, se vierte medio vaso de salsa de tomate y se deja que se cocine durante 10 minutos a fuego suave.
• Se aromatiza la carne a la boloñesa con una pizca de orégano, albahaca y pimienta negra, se pone a punto de sal y se rellenan las patatas cocidas y vaciadas con la salsa.
• Se espolvorea un poco de queso emmental rallado y se hornea a 200 ºC hasta que se gratine la superficie y se sirve al momento.

Una manera sencilla de preparar unas patatas rellenas es usando el microondas para cocinarlas. En este caso, el relleno también se hará de forma muy fácil en el pequeño electrodoméstico.

• Se lavan y pinchan las patatas antes de asarlas.
• Se cocinan sin pelar en el microondas durante 15 minutos a potencia media (se calculan unos cuatro minutos por patata).
• Una vez cocidas, hay que partirlas por la mitad y pelarlas sin llegar a quitar toda la piel.
• Se vacía el interior con una cucharilla reservando la pulpa.
• Se pica un diente de ajo muy fino y en crudo. Se junta con unas setas troceadas y se aliña con aceite de oliva, unas gotas de limón, una pizca de pimentón picante y una pizca de sal.
• Las setas se cocinan tapadas en el microondas durante dos minutos a potencia media.
• Al final, se mezcla la pulpa de la patata con queso crema bajo en grasa, se rellena la mitad de la patata y el resto con las setas cocinadas en el microondas. Se sirve al momento.

Esta es una preparación un poco más laboriosa, pero que resulta una delicia. Se puede dejar preparada de un día para otro, ya que potenciará el sabor de la salsa.

• Para elaborar estas patatas con sabor marino se comienza sofriendo media cebolla picada fina con un par de cucharadas de aceite de oliva en una sartén.
• Una vez blandita, se añaden unos 300 gramos de carne de los mejillones ya cocidos, troceado todo muy menudo.
• Se mezcla bien, se agrega medio vasito de vino blanco y, cuando se evapore, se vierte medio vaso de nata líquida.
• Se deja cocer hasta que reduzca, se pone a punto de sal y se reserva porque luego hay que mezclar este conjunto con la pulpa de patata.

En otra cazuela se elabora la salsa:

• Sofreímos la otra mitad de la cebolla. Se le agregan unas hojas de perejil y dos tomates cortados en trocitos.
• Después de unos 10 minutos al fuego, se liga la salsa con dos cucharadas de harina. Se agrega medio litro de caldo de pescado y un vaso de vino blanco.
• Se cuece la salsa a fuego lento durante 15 minutos y, después, se pasa por el pasapurés y por el colador para que quede una salsa fina.

• Se escogerán patatas pequeñas, casi de bocado, que habrá que cocer enteras en agua con sal durante 20 minutos.
• Tras su cocción, se escurren y, cuando estén templadas, se pelan y vacían en su interior.
• Se rellenan con el preparado de marisco mezclado con la pulpa de la patata, se rebozan con harina y huevo y se fríen en una sartén con abundante aceite caliente hasta que se dore la superficie.
• Las patatas se incorporan rebozadas a la cazuela de la salsa y se dejan cocer a fuego lento durante un par de minutos.
• Se deja que reposen unos 20 minutos tapadas y se sirven como plato único acompañadas de una ensalada.