La borraja es una verdura que pertenece a la familia de las Boragináceas, la cual está constituida por más de 1500 especies de plantas que suelen tener el tallo y la hojas cubiertos de pelos ásperos.
Nombre científico:
Borago officinalis L.
Propiedades nutritivas y terapéuticas
En este aceite abundan las grasas insaturadas, en especial los ácidos grasos gamma-linolénico y linoleico. Ambos son esenciales, es decir, que nuestro organismo no puede producirlos por sí solo, lo que hace necesario su aporte diario a través de la dieta. También contiene cantidades apreciables de ácido oleico, un tipo de grasa monoinsaturada característica del aceite de oliva. A partir del ácido gamma-linolénico se producen en el cuerpo unas moléculas muy importantes llamadas prostraglandinas que tienen, entre otras, las siguientes propiedades: impiden la formación de sustancias inflamatorias, tienen acción vasodilatadora, regulan la liberación y acción de los neurotransmisores (mensajeros químicos), inhiben la formación de coágulos, contribuyen a reducir la colesterolemia y regulan los efectos de las hormonas femeninas. Además, el aceite de borraja actúa como emoliente; suaviza o ablanda la piel y las mucosas.
¿Quiénes se pueden beneficiar de este aceite?
El aceite de borraja es muy adecuado como complemento a la dieta para colaborar en la prevención y tratamiento de trastornos cardiovasculares. Se emplea, bajo control profesional, en caso de hipercolesterolemia, hipertensión y en personas que han sufrido accidentes cerebro y cardiovasculares. Por su acción sobre las hormonas femeninas se emplea como tratamiento del síndrome premenstrual y por su efecto emoliente o eudérmico, para mejorar o mantener en buen estado la piel y las mucosas. Así mismo, se está investigando la posibilidad de que este complemento tan rico en ácidos grasos esenciales sea útil para reducir el riesgo de recaídas en caso de esclerosis múltiple y para el tratamiento de diversas afecciones de la piel.
Posología y precauciones
Si bien depende de cada caso se suele pautar la ingesta de unos 150-300 miligramos al día. La administración de este complemento dietético debe ser siempre bajo la prescripción de un profesional, ya que se ha visto que puede interaccionar con ciertos fármacos.