Las parejas que comparten un programa para adelgazar tienen más éxito y comen mejor. Así lo señala un reciente estudio llevado a cabo por la doctora Megan Lewis, del Instituto Research Triangle. El dato resulta de gran interés, ya que en la actualidad existen cerca de 1.600 millones de adultos con sobrepeso, de los cuales 400 millones son obesos. El siguiente artículo explica cuáles son los beneficios de adelgazar en pareja, qué investigaciones existen al respecto, hasta qué punto es importante la motivación y ofrece dos consejos prácticos para mantener a raya a los kilos, en equipo.
Control del peso y cuidado de la salud: los beneficios de estar en pareja
Según un grupo de investigadores del Departamento de Psicología de la Universidad de Florida, en Estados Unidos, el noviazgo tiene un efecto protector frente al sobrepeso y la obesidad. Los resultados del estudio, publicado en el Journal of the International Association for Relationship Research (IARR), en el que participaron 1.621 universitarios de 18 a 25 años, reveló que los estudiantes con una pareja estable no solo gozan de mejor salud mental, menos estrés y menos depresión, sino que, además, tienen menos sobrepeso y obesidad que los que prefieren estar sin pareja.
Sin embargo, en los últimos estudios realizados en España se reflejan algunos datos interesantes de resaltar. El 53,8% de la población tiene exceso de peso. De este altísimo porcentaje, los hombres presentan mayor sobrepeso y obesidad que las mujeres, aunque a partir de los 65 años de edad, ellas ganan en sobrepeso y obesidad a los hombres. Algunas investigaciones apuntan que quienes conviven en pareja de forma estable tienen mayor sobrepeso y obesidad. Aunque se habla incluso de un aspecto «contagioso» de la obesidad, vivir en pareja ejerce, en general, un efecto positivo sobre la salud: supone contar con un soporte emocional importante y beneficiarse del cuidado mutuo.
La pareja, un motivo de peso para adelgazar
Para las personas con sobrepeso u obesidad, un motivo de peso para perder esos kilos de más es recuperar su relación de pareja, tal como reflejan los estudios que analizan la motivación para adelgazar de las personas. Un ejemplo es la investigación realizada por la Facultad de Psicología de la Universidad de Valencia, que destaca entre los motivos para adelgazar, el de sentirse cómodo al relacionarse con los demás, y por supuesto el mejorar la relación con la propia pareja, esposo o esposa.
La pareja nos puede ayudar a lograr el objetivo de adelgazar. Pero, además, el hecho de bajar de peso, mejorar la conducta alimentaria, la relación con los alimentos y la actividad física supondrá una mejoría en la relación de pareja. Así, puede decirse que el beneficio es bidireccional, o que el beneficio se multiplica, porque uno ayuda al otro, el otro se beneficia de esta ayuda, la relación entre ambos se beneficia y el que ayuda termina beneficiado también.
Adelgazar: la importancia de estar motivado
En las últimas décadas, los psicólogos han demostrado que se pueden curar enfermedades somáticas -como las cefaleas, el insomnio, la hipertensión o ciertas enfermedades coronarias- si se modifica la conducta del individuo. Es decir, que existen conductas peligrosas para la salud, y lo que debe hacerse no es tratar la enfermedad en sí, sino corregir dichas conductas. Pues bien, esta técnica llamada medicina conductual o terapia conductual también se aplica para tratar la obesidad y el sobrepeso, frente a los tratamientos con pastillas y sin esfuerzo que tienen poca o ninguna eficacia a largo plazo.
Lo que se busca en el paciente es lograr la máxima adherencia posible al tratamiento, que no consiste en tomar pastillas sino en modificar su conducta o su estilo de vida, como se le llama ahora. En el caso de la obesidad y el sobrepeso, los aspectos de la conducta que más se trabajan son los relacionados con el sedentarismo, el estrés, el atracón compulsivo, las cantidades de la ingesta o el tipo de alimentos adquiridos.
El sedentarismo, el estrés, el atracón compulsivo, las cantidades o el tipo de alimentos que se comen son los aspectos a modificar
La terapia conductual que se centra en una alimentación saludable, un estilo de vida más activo y un mayor control de las emociones ha logrado resultados muy positivos en la lucha contra la obesidad y el sobrepeso. Y dentro de estos programas es donde se podría hablar de dos técnicas más, la terapia de grupo, donde se aprende de los errores y aciertos de otros pacientes, y la terapia de pareja, donde el compañero o la compañera adquieren el rol fundamental de ayudar, apoyar, fomentar y motivar el cambio, como un entrenador personal.
En un estudio realizado en la Universidad de Murcia se observó que la terapia conductual basada en la dieta mediterránea es efectiva para el tratamiento de la obesidad y que solo hubo un abandono de la dieta del 4% de los pacientes en un tratamiento que duró seis meses. El equipo de expertos que llevó cabo el programa explicó su éxito porque los pacientes llevaban un registro de los alimentos que ingerían y por la asistencia a la terapia de grupo. También se señaló que el abandono de unos pocos se debió al estrés, la pérdida de motivación y la tendencia a comer cuando uno se aburre.
La clave para mantener la motivación, seguir con el plan de ejercicio y controlar el estrés y las emociones que nos lleven a abandonar la dieta puede estar en encontrar el apoyo de nuestra pareja. Un reciente estudio revela que las parejas que comparten un programa para adelgazar tienen más éxito y comen mejor.
Según este estudio, las personas casadas que asisten juntas a un programa para adelgazar logran sus objetivos mucho mejor que las personas que lo hacen en solitario. En concreto, se comprobó que los matrimonios lograban perder más kilos, llevar una dieta más sana, mejorar más su presión arterial, aumentar más el consumo de vegetales, disminuir más el consumo de proteínas ricas en grasas y consumir menos comida rápida. Y que los hombres parecen beneficiarse más que las mujeres, en particular, al mejorar más su actividad física.
- Repartirse las tareas. Hay muchos frentes que abordar en el tratamiento de la obesidad o el sobrepeso. Por lo tanto, conviene que la pareja se distribuya las responsabilidades. Uno puede encargarse de controlar la compra, plantear los menús y proponer lo que se come cada día, mientras que el otro puede proponer un plan de ejercicio para ambos y planificar las actividades de ocio del fin de semana para evitar la TV y el apoltronamiento en casa.
Tener el apoyo de un profesional. Además del trabajo de pareja es conveniente el apoyo de un profesional que oriente las decisiones que se toman y supervise el control semanal o quincenal en la báscula, que hace mantener la motivación.