Un informe de la Fundación Española de Nutrición (FEN) advierte de que la futura normativa sobre venta de productos fitosanitarios, que se debate actualmente en Bruselas, puede provocar que los consumidores españoles se alejen de la dieta mediterránea.
Las consecuencias de las últimas propuestas de la Comisión Europea y de la Eurocámara para la venta de este tipo de sustancias son analizadas en el estudio «Repercusiones del proyecto de reglamento sobre autorización y comercialización de productos fitosanitarios: un enfoque nutricional», presentado ayer por la FEN. Así, los informes científicos de varios países europeos señalan que estas propuestas para la reducción de fitosanitarios provocarán una subida de los precios y una menor oferta de ciertos alimentos, aseguraron el presidente de la FEN, Gregorio Varela, y el director general de la Asociación Española para la Protección de las Plantas (Aepla), Carlos Palomar.
Si sale adelante la actual propuesta de reglamento sobre la autorización y comercialización de productos fitosanitarios, caerá de manera importante la producción de frutas, hortalizas, cereales y patatas en Europa, ya que no se podrán combatir las plagas de una manera efectiva, según resalta el informe. Si el consumo de estos productos cae, los españoles se alejarán de la dieta mediterránea, que es «sinónimo de dieta prudente y saludable», apunta este trabajo, que recuerda que recientes estadísticas recogen que la población española es deficiente en cuanto a consumo de cereales y derivados, verduras y hortalizas, frutas y leguminosas.
Ventajas de los fitosanitarios
Una subida de los precios de los alimentos de origen vegetal puede «agravar esta situación de carencia en estos determinados nutrientes y en otros en los que sí se cumplían las recomendaciones de ingesta», indica el estudio, que explica, además, que las ventajas del uso de fitosanitarios en la agricultura son «muchas, aumentado la producción, la eficiencia de los cultivos y del terreno cultivable, la disponibilidad de fruta, vegetales y cereales y otros alimentos a bajo coste, la calidad y seguridad de los productos».
El Parlamento Europeo votará previsiblemente el próximo enero el informe de la Comisión de Medio Ambiente sobre la comercialización de fitosanitarios, que posteriormente pasará al Consejo de Ministros de la Unión Europea para una segunda lectura en mayo.
Entre las novedades que introduce figuran la pretensión de eliminar la inmensa mayoría de herbicidas, fungicidas o insecticidas, y la de limitar el uso de los permitidos antes del año 2013 hasta en un 50%.
