Casi el 90% de los españoles es consumidor habitual de cafeína, según un estudio de la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU), que refleja también que en España el consumo de café es menor que en otros países de la UE y, por el contrario, son más aficionados a los refrescos de cola. La OCU ha realizado una encuesta, junto con otras organizaciones de consumidores, entre 5.000 europeos (España, Bélgica, Francia, Italia y Portugal) con edades entre 15 y 74 años, en el marco de un estudio sobre las repercusiones del consumo de cafeína, un estimulante muy extendido entre la población, en la salud.
Detalla que España es el país menos «cafetero» de los participantes en el estudio, ya que un 66% de los encuestados toma café, mientras que en Bélgica, Francia o Italia este porcentaje ronda el 80%. Por el contrario, los españoles son los más aficionados a las bebidas de cola (48%) frente a los italianos (35%) o los portugueses (39%). Asimismo, el consumo de bebidas energéticas es modesto en todos los países (entre un 4% y un 7%).
En España, el consumo de café puede considerarse moderado y así, un 20% de los que beben café no lo toma todos los días, un 26% sólo toma una taza al día y un 31% afirma que consume dos tazas diarias, aunque otro 26% toma tres tazas o más.
Según el informe, el 30% de los consumidores de café declara que lo necesita para funcionar, «lo cual -a juicio de la OCU- demuestra un cierto grado de adicción, mientras que lo que menos engancha son las bebidas de cola». El estudio refleja que el 44% de las personas que toman café se sienten con más energía después de beberlo, mientras que sólo un 28% de los consumidores habituales considera que el café les quita el sueño y añade que los efectos de la abstinencia son más intensos en los que toman café y bebidas energéticas.