Cómo hacer vinagretas originales para tus ensaladas

La vinagreta es una salsa emulsionada inestable: cuando se unen sus ingredientes con el movimiento de un tenedor o una varilla, adquiere una consistencia cremosa, pero con el reposo pierde esa cremosidad.

Sus ingredientes principales son el aceite, el vinagre y la sal, con una proporción de 3/1. El aceite es la parte principal (tres cucharadas) y el vinagre es el complemento (una cucharada); la sal, al gusto.

Si se juntan en un recipiente y se remueven de forma enérgica, se ve cómo se unen para formar esa salsa cremosa, un aliño con un toque ácido que se debe usar justo en el momento de servir.

Las cinco ideas que te damos a continuación pueden adaptarse fácilmente a tus gustos y a la disponibilidad de ingredientes (en el calendario de frutas y el calendario de verduras puedes ver cuáles son los productos de temporada).

• Prepara la vinagreta con 6 cucharadas de aceite de oliva virgen, 2 de vinagre balsámico, unos trocitos de nectarina fresca y una cucharada de salsa de soja. Esta mezcla se remueve hasta formar una crema ligera.
• Para hacer la ensalada, utiliza lentejas ya cocidas, enjuagadas y escurridas, y alíñalas con la vinagreta balsámica y unos trocitos de nectarina.
• Luego, corta un calabacín en láminas finas, una cebolleta roja y unas tiras de pimientos rojos asados.
• Prepara una base de lechugas variadas y, sobre ellas, coloca las lentejas aliñadas y escurridas del aliño. Pon encima las hortalizas cortadas en láminas finas y aliñadas con la vinagreta antes escurrida de las lentejas.

• Pela 4 langostinos. Trocéalos, sáltalos a la plancha con un poco de aceite de oliva y reserva.
• Saltea después las cáscaras y las cabezas de los langostinos con 9 cucharadas de aceite de oliva.
• Una vez salteadas, retira, escurre, cuela y saca sus jugos al aceite de oliva. Así obtendrás un aceite con aroma de langostinos que podrás aprovechar para hacer la salsa vinagreta.
• Para elaborar la vinagreta, pica un trocito de cebolleta fresca, una puntita de pimiento verde, un trocito de ajo y de pimiento rojo, todo ello en cuadraditos muy pequeños.
• Mezcla estas hortalizas con el aceite de oliva aromatizada de langostinos, 3 cucharadas de vinagre y la sal. Remueve hasta conseguir una salsa estable y untuosa, añade los trocitos de langostinos previamente salteados y mezcla.
• Haz una ensalada con lechuga, cogollos de endivia, un poco de arroz cocido y escurrido, y unos trocitos de huevo. Alíñala con la vinagreta. 💡 Es recomendable tener todos los ingredientes casi recién sacados de la nevera para presentar una ensalada fresca.

• Primero, pela dos patatas y córtalas en láminas finas. Coge un puerro limpio, córtalo en tiras y pon todo junto en una sartén con 6 cucharadas de aceite de oliva y una pizca de sal.
• Tapa y cocina a fuego suave hasta que se confiten las patatas y los puerros.
• Escurre los jugos del confitado, mézclalos con 30 gramos de jamón ibérico troceado, medio kiwi también troceado, 2 cucharadas de vinagre de sidra y una pizca de sal.
• Presenta los puerros y patatas templadas con ayuda de un aro de montaje y aliña con la vinagreta de jamón y kiwi.

• Quita las cabezas de 4 sardinas, ábreles el vientre y enjuaga bien bajo el chorro de agua fría, limpiando la zona de las tripas y las escamas. Hay que escurrir para que no quede agua.
• Sala el interior de las sardinas y colócalas en un recipiente apto para el frigorífico.
• Después, elabora el escabeche mezclando un diente de ajo fileteado, 4 cucharadas de zumo de lima, los granos de media granada, la ralladura de lima, 4 cucharadas de vino blanco, 2 cucharadas de vinagre, un vaso de aceite de oliva, una hoja de laurel y un poco de pimentón picante.
• Cubre con esta mezcla las sardinas, tapa el recipiente e introdúcelo en el frigorífico durante dos horas.
• Una vez transcurrido este tiempo, saca las sardinas del escabeche y ponlas sobre una bandeja para el horno con parte del escabeche, desechando las hojas de laurel. Hay que asarlas en el horno precalentado a 200 ºC durante 10 o 15 minutos.
• Por otra parte, calienta en un cazo el escabeche restante hasta que se reduzca ligeramente y ligue la salsa. Deja enfriar.
• Prepara una ensalada con una base de patata cocida y cortada en rodajas, unas hojas de rúcula y las sardinas asadas (sin espina) y aliña con la vinagreta de granada y lima (en este caso convertido en un escabeche).

• Primero hay que triturar los pistachos con un robot de cocina (si no tienes, utiliza un mortero o un mazo de madera).
• En una sartén antiadherente sin aceite, tuesta ligeramente el polvo de pistacho y sácalo de inmediato para colocarlo en un bol.
• Añade al bol 6 cucharadas de aceite, 2 cucharadas vinagre de vino blanco, una pizca de sal y un poco de cebollino recién troceado. Hay que reservar esta vinagreta hasta el momento de servir.
• Por otro lado, lava las lechugas y, después de trocearlas con las manos, deja secar y reserva. Limpia y trocea las setas también con las manos.
• Pon 2 cucharadas de aceite en una sartén grande y, cuando esté caliente, saltea a fuego fuerte unos ajetes tiernos lavados y troceados, removiendo hasta que se ablanden.
• Después, agrega las setas con un poco de sal y otras 2 cucharadas de aceite de oliva virgen y saltea el conjunto hasta que las setas estén blanditas.
• Una vez salteadas, ponlas sobre las lechugas junto con los brotes de ajetes tiernos y cloca sobre la ensalada unas tiritas de salmón ahumado.
• Por último, remueve con energía la vinagreta de pistachos hasta conseguir una salsa homogénea y aliña. Sirve enseguida, para que no se enfríen las setas con los ajetes tiernos.