El 16 de octubre se celebra el Día Mundial de la Alimentación. Para ello, este año la FAO (Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura) ha puesto la mirada en todas las personas que forman parte de la cadena alimentaria, desde los productores hasta los consumidores. “Los consumidores son más que simples comensales. Tú también tienes el poder de influir en lo que se produce tomando decisiones alimentarias saludables, que a su vez contribuyen a tener sistemas alimentarios más sostenibles”, señala la institución. En este artículo, te proponemos acciones para comer mejor y te explicamos en qué consiste el Programa Educativo en Alimentación y Hábitos Saludables (PEAHS), desarrollado por la Fundación EROSKI y dirigido a los niños.
La alimentación saludable y sostenible no es una meta inalcanzable ni ajena a la ciudadanía. Por el contrario, todas las personas desempeñan un papel clave para alcanzar objetivos tan importantes como mejorar la dieta y las condiciones de producción de los alimentos, fomentar el cuidado del medio ambiente y evitar el desperdicio de comida. Así lo expone la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, que este año homenajea a los #HéroesDeLaAlimentación y que nos da ideas concretas para alcanzar estos objetivos beneficiosos para la salud de las personas y del planeta.
Qué hacer para comer mejor (y de manera más sostenible)
? Comer variado
Una dieta variada contribuye a una vida sana. Cuando elegimos comer alimentos saludables diversos (por ejemplo, distintos tipos de frutas o distintos tipos de verduras) fomentamos la variedad de los alimentos que se producen. Esto es saludable para las personas pero también lo es para el medio ambiente y el suelo. Como dice la FAO, «una dieta variada favorece la biodiversidad».
? Elegir alimentos de temporada
Los alimentos de temporada son más económicos, están en su punto de madurez y consumo. Además, comprar productos estacionales reduce la huella de carbono y el impacto medioambiental. Cuando los alimentos están fuera de temporada en una parte del mundo, deben importarse y viajar mucho antes de llegar a su mercado local.
? Elegir alimentos de proximidad
Escoger alimentos frescos, cultivados localmente o cerca de donde vivimos, es un modo de ayudar a los agricultores que producen los alimentos y a la economía de la zona. Cuando adquirimos productos de proximidad, apoyamos a los héroes de la alimentación.
? Evitar el despilfarro de comida
La pérdida y el desperdicio de alimentos pueden ocurrir en cualquier punto del sistema alimentario, desde la producción y el transporte hasta la comercialización y los propios hogares. Comprar y cocinar lo que necesitamos, aprender a almacenar los alimentos y aprovechar las sobras en la cocina son maneras de evitar el despilfarro. En este sentido, tenemos mucho margen de mejora. En 2019, España desperdició 1.352 millones de kilos de comida y bebida, según el Panel de Cuantificación del desperdicio alimentario en los hogares de España del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación.
? Cultivar algún alimento
Si tenemos algún espacio verde en casa, como un jardín o un balcón donde quepan macetas, podemos cultivar hierbas, verduras o frutas. Aunque el espacio sea pequeño, esta actividad tiene un importante valor didáctico. «Aprenderás mucho sobre la manera de producir alimentos y aumentarás tu aprecio por todo el trabajo que se dedica al cultivo de los productos», apunta la FAO.
? Apoyar iniciativas que mejoren el entorno y el sistema alimentario
La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura expone que todas las personas podemos tener un papel activo para lograr que productores, empresas y gobiernos «transformen nuestros sistemas alimentarios haciendo que las opciones de alimentos saludables sean más atractivas, disponibles y accesibles; proporcionando empleo decente y protección; y compartiendo tecnologías innovadoras».
Imagen: FAO
Apoyar a los productores y las empresas que lo hacen bien, así como promover hábitos alimentarios y de compra saludables (ya sea personalmente o en las redes sociales) son algunas ideas que ofrece la institución. Y esto sin olvidar la enorme importancia de la educación alimentaria entre los más pequeños. «Al apoyar iniciativas de desarrollo, como los programas de alimentación y nutrición escolar en tu comunidad local, puedes sensibilizar sobre la importancia de comer bien y promover una alimentación saludable a través de la educación», remarca.
Objetivo: enseñar a los niños a comer sano
Enseñar a los niños a llevar una dieta saludable es clave para su desarrollo y su bienestar, sobre todo, si tenemos en cuenta las cifras más recientes de sobrepeso y obesidad infantil, que son muy preocupantes. Para hacer frente a esta realidad, la Fundación EROSKI impulsa el Programa Educativo en Alimentación y Hábitos Saludables (PEAHS) Energía para crecer; un programa que nació en 2012 y que cuenta con la colaboración de profesionales de medicina, nutrición y dietética, psicopedagogía y pedagogía, así como con la de otras organizaciones, como el Basque Culinary Center (BCC), Unicef o WWF.
El PEAHS Energía para Crecer está dirigido a niños de entre 3 y 12 años. Hasta la fecha, han participado más de 1.300.000 escolares y el objetivo es llegar a formar a dos millones de niños y niñas, y a sus familias, para 2025. Pero ¿en qué consiste? A grandes rasgos, tiene dos partes:
- Una teórica, adaptada a las diferentes edades, con unidades didácticas que tratan temas como la alimentación equilibrada, los hábitos de vida saludables, los productos locales, las dietas de otros lugares del mundo y la sostenibilidad del planeta.
- Una práctica, que se compone de talleres y juegos en los que los niños aprenden a elaborar un menú equilibrado y saludable. Para ello, conocerán a los productores de primera mano, aprenderán a elaborar una lista de la compra equilibrada y, por último, cocinarán los productos comprados en la tienda con la ayuda de chefs del Basque Culinary Center.
? Energía para crecer, las novedades para este curso
Este año, la iniciativa se renueva para ofrecer más contenidos y hacerlo de forma segura debido a la pandemia de covid-19. Por primera vez, se ofrecerán talleres online. Los talleres presenciales se sustituirán por vídeos que se podrán visualizar en clase o en familia. Además, destacan las mejoras en la web de la Escuela de Alimentación (es más sencilla, divertida e intuitiva), la incorporación de un juego interactivo para promover la alimentación equilibrada, el añadido de nuevas unidades didácticas, más herramientas y recursos digitales.