Las principales diferencias entre lasañas preparadas se hallan en los ingredientes y en la composición nutricional. En este sentido, a veces nos encontramos con la dificultad de que estos elementos entran en conflicto. Es decir, las que tienen buenos ingredientes tienen un peor perfil nutricional, y viceversa. Esto complica la elección, sobre todo si añadimos otro factor que puede decidir la compra: el precio.
Lasañas: en qué fijarse
A primera vista las lasañas pueden parecer similares y, además, contienen una larga lista de ingredientes, lo que puede dificultar la selección. Para tomar una decisión hay que tener presentes cuatro aspectos clave:
👀 Presentación
Podemos encontrar lasañas ultracongeladas, refrigeradas o a temperatura ambiente. Las refrigeradas conservan mejor el sabor, el aroma y la textura originales y requieren poco tiempo de preparación, pero su vida útil es corta y debemos mantenerlas en frío.
👀 Ingredientes
Conviene optar por aquellas con ingredientes de calidad: leche, tomate o aceite de oliva, en lugar de leche en polvo, concentrado de tomate o aceite de girasol.
👀 Relleno
La carne de cerdo resulta más económica, pero la de ternera es más apreciada por su sabor. Se debe observar su proporción, porque en algunos es escasa.
👀 Composición nutricional
Estos productos aportan una gran cantidad de calorías, sobre todo si la grasa es considerable. Ojo con la sal: cuanto menos, mejor.
Comparativa de lasañas y valoraciones
En nuestra Guía de Compra de lasañas preparadas hemos analizado y comparado 10 tipos de lasañas (8 de carne y 2 vegetales). Las siguientes tablas permiten apreciar, de un vistazo, las principales características de las distintas opciones.
Si nos fijamos en la calidad de los ingredientes, el mejor producto es Baserria Km0: tiene una cantidad considerable de carne de ternera (19 %), además de otros ingredientes valorados, como mantequilla, aceite de oliva virgen, leche, tomate, verduras o queso Idiazábal. Sin embargo, no sale bien parado en el aspecto nutricional: es el que contiene más cantidad de grasa, sal y calorías, lo que explica que su valoración global no sea tan buena.
Con la lasaña Chef a Casa ocurre algo parecido. Contiene una cantidad notable de carne de ternera, además de leche y mantequilla, pero uno de los precios más altos y una cantidad importante de grasa. Además, cabe destacar que, a pesar de tener sello ecológico, está producida en Italia, lo que implica un considerable impacto ambiental asociado al transporte.
Si consideramos la relación calidad-precio, las mejores opciones serían, por este orden, La Sirena, con una cantidad notable de carne de cerdo y el precio más bajo, y Eroski, que tiene una cantidad similar de carne de vacuno y cerdo, y el segundo precio más bajo.
