Es bien sabido que en casos de estreñimiento es importante llevar a cabo una dieta rica en fibra, realizar ejercicios que refuercen los músculos abdominales, beber suficiente cantidad de líquidos y evitar alimentos astringentes. Pero además, existen algunos remedios caseros que pueden ayudar a evitar o mejorar los síntomas del estreñimiento.
Prácticos y eficaces
Tomar un kiwi en ayunas o un café solo, un zumo de naranja, un vaso de agua templada… todas ellas son posibles opciones para intentar mejorar los síntomas del estreñimiento. No es difícil incluir estos alimentos en la dieta y, por lo general, con ellos se suelen conseguir buenos resultados. Sin embargo, no hay que olvidar que han de formar parte de una dieta rica en frutas frescas y desecadas (higos secos, pasas, etc.), hortalizas y verduras, legumbres, cereales integrales y frutos secos, todos ellos alimentos ricos en fibra. Es importante saber que del mismo modo que hay alimentos con efecto laxante, existen otros que provocan el efecto contrario. Estos son los alimentos astringentes (ricos en taninos, sustancias con propiedades astringentes), entre los que se encuentran el membrillo, el arroz blanco, el té o la manzana, siempre que ésta se tome pelada, rallada y oscurecida, ya que es entonces cuando aparecen en ella los taninos. No obstante, si combinados los alimentos astringentes con otros ricos en fibra, su efecto anti diarreico o astringente se reduce de manera importante. No es lo mismo tomar sólo arroz y huevo, que ensalada de arroz y huevo con pimientos…
Una compota que puede ser la solución
La elección de la manzana y las ciruelas pasas como ingredientes de esta rica compota, se debe a que ambos alimentos poseen un importante efecto laxante. En el caso de las ciruelas pasas, además de contener cantidades interesantes de fibra soluble e insoluble que estimula la actividad intestinal (16 g de fibra por cada 100 g de porción comestible), poseen otros componentes de modo natural como el sorbitol (un azúcar alcohol que aporta menos energía que el azúcar común) o los derivados de la hidroxifenilxantina, que por sí solos estimulan el tránsito.
Por su parte, la manzana también es una fruta con un elevado contenido en fibra soluble e insoluble (2,3 g por cada 100 g de porción comestible), si bien ésta no alcanza a la de las ciruelas pasas. A pesar de que cuando la manzana se oscurece se convierte en un alimento astringente, paradójicamente, si se toma cruda posee un suave efecto laxante útil para combatir y tratar el estreñimiento.
Gracias a la unión de ambos alimentos en la preparación de la compota, ésta resulta una merienda, desayuno o postre, rico en fibra, así como en diferentes compuestos con acción laxante, por lo que puede resultar de gran ayuda para personas con problemas de estreñimiento.