El mango se puede encontrar en el mercado durante todo el año, sin embargo, su exportación no se lleva a cabo a gran escala, ya que es una fruta delicada que no soporta bien las condiciones de transporte. Por tanto, la mejor época para disfrutarlos en nuestro país es en invierno. En el mercado nacional, la variedad más consumida es el mango ‘Sensación’, de pequeño tamaño y sabor ligeramente ácido y muy afrutado, que procede del sur de África.
Fuente de antioxidantes
Su composición energética y nutritiva ofrece un valor calórico bajo dado su moderado aporte de hidratos de carbono, principalmente sencillos (proporcionan el sabor dulce). Contiene cantidades interesantes de minerales como el potasio y magnesio.
En cuanto a las vitaminas, los frutos maduros son fuente importante de betacaroteno (en nuestro organismo se transforma en vitamina A) y de vitamina C: 300 g de pulpa cubren la totalidad de las necesidades diarias de un adulto de vitamina C y de vitamina A. También contiene, en menor medida, vitaminas del grupo B entre las que destacan los folatos.
Por su contenido en nutrientes antioxidantes se trata de una fruta de gran interés dietético y nutricional, ya que dichas sustancias son protectoras de la salud de nuestro organismo. El mayor inconveniente del mango, debido a ser un producto exportado y delicado, es su elevado precio.