Probablemente no existe planta medicinal más conocida y estudiada que el ajo. Se sabe que el ajo ejerce efectos sobre numerosos órganos de nuestro cuerpo y sobre su funcionamiento, gracias a diversos compuestos entre los que se encuentra el ácido alílico, una sustancia activa que actúa como microbicida.
Principales beneficios del ajo verificados por numerosos estudios científicos:
* Ayuda a combatir un buen número de hongos, bacterias y virus. * Aumenta las secreciones bronquiales, por lo que se dice que es expectorante, desinfectante y descongestionante. * Estimula las mucosas gastrointestinales provocando un aumento de las secreciones digestivas y de la bilis. * Es diurético y antiinflamatorio. * Su consumo frecuente provoca vasodilatación (aumento del diámetro de pequeños vasos sanguíneos; arteriolas y capilares) lo que hace que la sangre fluya con mayor facilidad y que disminuya la presión sanguínea.
* Ayuda a prevenir y aliviar la claudicación intermitente (dolor en las piernas al caminar causado por la arterioesclerosis).
El ajo morado y el Helicobacter pylori
El Departamento de Gastroenterología del Hospital Ramón y Cajal de Madrid, ha concluido un estudio epidemiológico que pretende demuestrar que la solución acuosa de ajo morado es capaz de inhibir la bacteria Helicobacter pylori, la cual se ha asociado con una mayor incidencia de úlcera gastroduodenal y de cáncer gástrico. El trabajo se inició hace dos años con el principal objetivo de determinar si la población de la comarca de Las Predroñeras, el Provencio y Las Mesas, en Cuenca, y la más importante productora de esta modalidad de bulbo, presentaba menor número de casos de úlcera y de cáncer gástrico. En este estudio epidemiológico colaboraron más de 2.000 vecinos de la citada comarca, con edades comprendidas entre los 25 y los 65 años. Los resultados han sido favorables y ya se han presentado en diversos congresos internacionales que se han desarrollado en Helsinki, Roma y recientemente en España.