El gazpacho pierde el contenido de vitamina C presente en sus ingredientes cuando se prepara la mezcla de todos ellos. Un estudio conjunto de la Universidad Complutense de Madrid y la Universidad de La Laguna revela que en este proceso desaparecen cantidades de vitamina C y otros ácidos orgánicos. Por eso, aconsejan que se elabore justo antes de su consumo.
Los análisis revelaron que la presencia de ácido ascórbico y ácido deshidroascórbico, componentes de la vitamina C, son inferiores al que obtendríamos con la suma de estas sustancias contenidas en las hortalizas iniciales. «Esto sugiere que existe una pérdida de su capacidad antioxidante», explica Elena Mª Rodríguez, coautora de la investigación.
De entre sus ingredientes, el pimiento fue el que presentó mayor contenido en vitamina C, seguido del tomate. Respecto a los ácidos orgánicos, el ajo y el tomate fueron los alimentos donde se encontraron mayores concentraciones y en el pepino, las más bajas.
El gazpacho es un alimento habitual en las mesas españolas durante los meses de verano y, además, es un conglomerado de virtudes nutritivas. Está demostrado que es una fuente natural de vitaminas A, C y E, de hidratos de carbono, sales minerales, fibra vegetal y antioxidantes. Esta composición lo convierte en un alimento idóneo para refrescar los calores del periodo estival por su carácter isotónico y, todo ello, con un aporte calórico muy reducido.