No sólo es una de las frutas más sabrosas, sino también una de las más sanas, ya que aporta hidratos de carbono, vitaminas y minerales tan importantes como el potasio y el magnesio.
A pesar de que muchas personas piensan que es una de las frutas más calóricas, en comparación con una manzana, tiene un menor aporte calórico.
Este error tan extendido es común ya que muchas personas suelen fijarse en el aporte de calorías de las frutas y de otros alimentos, en diversas tablas que expresan el contenido energético o calórico y nutrititivo por cada 100 g de porción comestible, lo que no es precisamente lo más adecuado. Los datos realmente fidedignos tienen que hacer referencia a «medidas caseras», es decir, lo que realmente nos comenos. No tomamos 100 g de yogur, nos comemos una unidad comercial de 125 g….
Así, un plátano de tamaño mediano y sin piel pesa aproximadamente 80 g, mientras que una manzana mediana sin piel ni pepitas pesa aproxidamente 150 g y, las calorías para una y otra fruta son «66» y «70», respectivamente.