Las coles con repollo pertenecen a la familia de las Crucíferas, una familia de verduras ricas en compuestos azufrados considerados potentes antioxidantes que ayudan a prevenir enfermedades
Los repollos son, con toda probabilidad, el grupo de coles más popular. Son originarios de las zonas costeras de Europa central y meridional, aunque en la actualidad se producen en todo los países. Los repollos se encuentran en su mejor momento en los meses de invierno, aunque podemos disponer de ellos durante todo el año. Los ejemplares de mayor calidad son los más duros, crujientes, compactos y pesados en relación con su tamaño.
La berza es una hortaliza rica en agua, vitaminas y minerales y fibra. Además destaca en su composición la presencia de compuestos azufrados, responsables del olor tan particular que desprende el repollo durante su cocción, que además poseen una importante acción antioxidante.
Para cocinar los repollos hay que eliminar las hojas externas. A continuación se corta el repollo por la mitad y se elimina el troncho por su dureza. Si cuando se corta se observa un cerco de color amarillento en la zona central, esto es señal de que resulta picante y amargo. El resto se lava con cuidado y se deja en remojo unos minutos en agua con sal y un chorrito de vinagre o limón y se trocea según la receta que se quiera elaborar. El principal producto elaborado a partir del repollo es el chucrut. Éste se obtiene al fermentar la col en salmuera, lo que aumenta su conservación y constituye un alimento muy apreciado y popular en varios países centroeuropeos, Estados Unidos y Rusia.