Esta Semana Santa podemos dedicar parte de nuestro ocio para hacer un postre muy típico, además de pan casero sin levadura. Conocemos la receta de torrijas de toda la vida: con leche, vino o un baño de miel. Incluso grandes chefs como Martín Berasategui han hecho su propia versión del clásico. Pero ¿puede convertirse este postre de pan, azúcar y canela en un alimento saludable? El postre de Cuaresma por excelencia, las torrijas, ha sabido adaptarse a los nuevos gustos y tendencias nutricionales, ofreciendo versiones muy distintas a la original. Hoy, las de siempre conviven con otras más innovadoras. En este artículo se recogen cinco propuestas distintas de torrijas para degustar en Semana Santa.
¿Cuál es el origen de las torrijas?
¿Sabías que…..?
- 👨🍳 La primera referencia que aparece de las torrijas data del siglo V, VI, ya que había un postre, sin nombre conocido, basado en tomar rebanadas de pan después de haberlas metido un rato en leche.
- 👨🍳 Es una receta introducida en Europa por los árabes que, como ahora, alternaban su ingesta con vino, azúcar y miel, aunque el ingrediente principal siempre ha sido el pan.
- 👨🍳 El nombre de torrija aparece como tal por primera vez en el año 1591, hasta entonces se llamaban sopas (por el pan) y torradas.
- 👨🍳 En el siglo XV empieza a vincularse este postre con el nacimiento de los bebés. La razón era doble; por un lado se pensaba que este alimento contribuía a estimular la leche de la madre para el bebé y, por otro, servía para ofrecérselo a los invitados que llegaban a casa para conocer al recién nacido.
- 👨🍳 A partir del siglo XX empiezan a comercializarse en bares y era habitual tomarlas junto a un vaso de vino.
Ingredientes de la receta para Semana Santa
- ✅ Rebanadas de pan
- ✅ Leche templada
- ✅ Almíbar
- ✅ Miel
- ✅ Vino
- ✅ Huevo
- ✅ Aceite
- ✅ Canela
Desde las torrijas de la abuela hasta las reinventadas. Si entre las primeras están las elaboradas de la forma más tradicional (con leche, vino o miel), y cuya receta se mantiene intacta de generación en generación, entre las últimas se encuentran aquellas que rompen con las tradiciones de antaño.
Puede que los puristas no estén de acuerdo ni con la manera de elaborar estas torrijas ni con sus ingredientes. Sin embargo, también tienen sus seguidores (y no son pocos).
Cómo hacer torrijas
A continuación se describen las diferentes formas de cocinar las torrijas, en función de los ingredientes señalados:
⭐Torrijas de leche
Se hallan entre las preferidas por los más pequeños de la casa en estos días, sin contar los huevos de Pascua. Para prepararlas solo tenemos que seguir los siguientes pasos:
- 👉 Poner a calentar un litro de leche en un cazo con media taza de azúcar y unas cáscaras de naranja, limón y una ramita de canela.
- 👉 Damos vueltas continuamente con una cuchara hasta que el azúcar se disuelva.
- 👉 Antes de que llegue a hervir, retiramos del fuego y dejamos que repose todo durante unos 10 minutos.
- 👉 Sumergimos cada rebanada en la leche y las dejamos reservadas en un plato.
- 👉 Ponemos a calentar aceite para freírlas.
- 👉 Mientras, batimos cuatro huevos y rebozamos el pan.
- 👉 Freímos cada una de las torrijas hasta que queden bien doraditas por ambos lados, y las dejamos reposar sobre un papel de cocina absorbente para retirar el aceite sobrante.
Hasta aquí, todas las torrijas tradicionales se elaboran más o menos del mismo modo. En este punto, la receta aporta su peculiaridad. En este caso, hay que sumergirlas en leche con canela y azúcar y guardarlas en el frigorífico. Conviene comerlas antes de que pasen cuatro días.
⭐Torrijas con miel
Son muy fáciles de preparar.
- 👉 En primer lugar, seguimos los pasos de la receta anterior.
- 👉 Una vez fritas las rebanadas de pan, solo tenemos que rociarlas bien con miel rebajada con un poco de agua. Eso sí, son mucho más dulces que las bañadas en leche.
⭐Torrijas de vino tinto
- 👉 En un cazo ponemos a calentar en un cazo vino tinto (150 ml) junto con 100 ml de agua, 25 g de azúcar, una cáscara de limón y una ramita de canela.
- 👉 Dejamos que todo hierva durante unos tres minutos hasta que el alcohol se evapore.
- 👉 Una vez lo haya hecho, tapamos el cazo para que infusione un rato más hasta que se enfríe.
- 👉 En una sartén honda calentamos el aceite de oliva. Cortamos el pan en rebanadas y remojamos cada una de ellas en vino.
- 👉 Después, escurrimos y vamos rebozándolas una a una con el huevo batido.
- 👉 Freímos cada torrija hasta que queden doradas.
- 👉 Cuando las saquemos, las colocamos sobre papel de cocina.
- 👉 Para que queden más ricas, hacemos un pequeño almíbar con miel y agua.
⭐Torrijas sin aceite
Si las frituras nos provocan rechazo, podemos disfrutar de unas ricas torrijas hechas en el horno.
- 👉 Para ello, colocamos las rebanadas de pan en una fuente y las cubrimos con la leche y la nata que previamente hayamos mezclado y calentado y que ya está fría.
- 👉 Esperamos a que se absorba la mezcla y ponemos canela por encima.
- 👉 A continuación, pasamos las rebanadas una a una por el huevo y las ponemos en una bandeja de horno.
- 👉 Las dejamos unos 15 minutos a 180 ºC con calor por arriba.
- 👉 Las damos la vuelta, esperemos otros 15 minutos y solo nos quedará espolvorear azúcar por encima.
⭐Torrijas veganas
Con algunos ajustes en la receta tradicional es posible preparar unas torrijas sin ingredientes de origen animal; es decir, aptas para una dieta vegana.
- 👉Primero hay que poner a calentar la leche de soja con una rama de canela y una cucharada de sirope de agave.
- 👉Cuando empiece a hervir la retiramos y dejamos que se enfríe.
- 👉Cortamos el pan, remojamos las rebanadas en la leche de soja y las colocamos en una rejilla para que suelten el exceso de leche.
- 👉Ponemos el sobrante de leche de haber remojado el pan y le añadimos la harina para rebozar. El objetivo es que quede con una textura similar al huevo batido.
- 👉Rebozamos las rebanadas de pan en la mezcla y después las freímos en el aceite bien caliente.
- 👉Por último, las sacamos, dejamos sobre un plato con papel de cocina y espolvoreamos canela en polvo.
Consejos y dudas extra
🥖 ¿Sirve cualquier tipo de pan?
En principio es una receta que nace para aprovechar las sobras del pan, de manera que, en un principio, las torrijas se pueden hacer con el pan del día anterior. Ahora bien, esta receta ha evolucionado de la misma manera que lo ha hecho el pan. En estos momentos se comercializan más de diez tipos de pan; rústico, de hogaza, fabiola, bagette, pan blanco, integral, espelta, etc. A mayor calidad del pan, mejores resultados se obtendrán.
🥛 La cantidad de Leche
No hay un consenso acerca de si compensa más escurrir bien la torrija después de haberla empapado en leche o no, con el fin de que quede más cremosa. Hay que tener en cuenta que cuanto más leche contenga más difícil será su manipulación para rebozarla en huevo y freírla.
🕞 Conservación
A temperatura ambiente en una despensa pueden aguantar hasta dos días; la clave está en dejarlas enfriar en un papel absorbente para colocarlas después en un envase de plástico y colocar encima otro papel absorbente. Luego solo hay que cerrar el envase de manera que no entre nada de aire. En la nevera pueden durar entre tres y cuatro días y también se pueden congelar. Bastaría con echar un un poco de azúcar por encima o canela en polvo, leche condensada…, a gusto del consumidor.
Las torrijas son un alimento con un alto valor energético. Su alto contenido en azúcar produce elevaciones bruscas de los niveles de glucosa en sangre con caídas rápidas, por lo que su ingesta no está recomendada en caso de diabetes. Tampoco es aconsejable si se padece sobrepeso y obesidad. Sin embargo, si solo se desea rebajar su aporte energético, siempre se podrá sustituir el azúcar por un edulcorante y disfrutar de un par de torrijas.
Además del azúcar, es un postre muy nutritivo: el huevo aporta proteínas de alto valor biológico, grasas, lecitina, vitaminas y minerales como el hierro; la leche es fuente de proteínas, grasas, calcio y vitamina B2; y el pan, un alimento energético, rico en hidratos de carbono complejos. Para aquellas personas que sufren de inapetencia o desnutrición, es una opción interesante: en poco volumen de alimento se está ingiriendo gran cantidad de nutrientes.