La cantidad de melocotón no es la que parece
El envase destaca “250 g de melocotón del Valle del Ebro”. A pesar de que contiene 250 g de producto, esto no implica que todo sea melocotón, como podría interpretarse con esa frase. La explicación la encontramos en otra mención: “Preparado con 100 g de melocotón por cada 100 g de producto”.
El melocotón sufre mermas durante el procesado, porque pierde agua, y esa declaración es una forma de expresar la cantidad de ingrediente utilizado en 100 g de producto acabado y que la normativa obliga a aplicar cuando, debido a la pérdida de humedad durante el procesado, la cantidad total de todos los ingredientes empleados supera el 100 %.
Este es el caso: en el producto final el porcentaje de melocotón es inferior, ya que en la elaboración también se utilizan otros ingredientes, cómo azúcares de fruta.
¿Realmente es pura fruta?
El nombre comercial de este producto es “Pura fruta”, pero esto no quiere decir que la fruta sea el único ingrediente, sino que todos los ingredientes proceden de frutas.
Los ingredientes son: melocotón, azúcares de fruta y gelificante (pectina de la fruta y zumo concentrado de limón). Que los azúcares añadidos procedan de la fruta, de la remolacha, de la caña de azúcar o de cualquier otra fuente no tiene importancia desde el punto de vista nutricional y su impacto negativo sobre la salud es el mismo.
La composición es más importante que el origen
La declaración “Origen 100 % fruta” no quiere decir que la fruta sea el único ingrediente, sino que los diversos ingredientes utilizados proceden de las frutas, como, por ejemplo, el azúcar. Además, la declaración “solo con azúcares procedentes de la fruta” puede inducir a pensar que estos no se han añadido, sino que son los que lleva el melocotón.
En este producto hay aproximadamente 9 g de azúcar procedentes del melocotón. Los 21 g restantes proceden en su mayoría de los azúcares de la fruta añadidos y, en una proporción mínima, del zumo concentrado de limón.
Todos se consideran azúcares libres. A diferencia de las frutas enteras, en las que los azúcares se consideran intrínsecos por estar contenidos dentro de la matriz, en este producto los azúcares se liberan en el proceso de triturado y cocinado de la fruta. Con una ración de 20 g se ingieren 6 g de azúcar libre.
¿Por qué no es una mermelada?
A pesar de que la presentación y su uso gastronómico puede recordar al de una mermelada o una confitura, legalmente no lo es ya que no cumple con las cantidades mínimas de azúcares que se exigen para estos productos. Su denominación de venta es fruta para untar.
Conclusión
Es un producto con un alto porcentaje de azúcares libres. Aunque su origen sea la fruta, no están contenidos dentro de la estructura de la fruta y su consumo debe limitarse, ya que tiene efectos adversos. Esto no ocurre con el azúcar presente en las frutas enteras. Por la etiqueta puede entenderse que todo este producto es fruta, pero esto no es así debido a las mermas que se producen en el procesado.