Las intervenciones de la Guardia Civil para inmovilizar partidas de piensos con harinas cárnicas se han generalizado. Miles de kilos de productos destinados la alimentación de animales de granja han sido retenidas en Andalucía y Cataluña. Una de las más relevantes tuvo lugar ayer en Vilanova i la Geltrú, donde una patrulla del Servicio Marítimo inmovilizó 4.200 kilos que debían destinarse a la alimentación de lubinas y doradas de una piscifactoría.
En lo que se interpreta como una manifestación de buena voluntad para no crear malestar entre los ganaderos y las comunidades autónomas afectadas, el director de la Guardia Civil, Santiago López Valdivielso subrayó que las más de 3.000 inspecciones realizadas para velar por el cumplimiento del plan contra la Enfermedad Espongiforme Bovina (EEB) se han realizado no sólo en explotaciones ganaderas, sino también en mataderos, industrias cárnicas, fábricas de piensos e intermediarios.
A la vista de los preocupantes resultados preliminares de la operación, con 2.000 irregularidades detectadas y siete detenidos en apenas un mes, la Guardia Civil ordenó prorrogar las actuaciones de vigilancia, que en principio debían haber terminado el 31 de diciembre.Desde el pasado martes, el Seprona se ha incautado en la provincia de Almería de 31.425 kilos de piensos irregulares, de los que 8.915 presentaban etiquetas en las que se especificaba que contenían componentes derivados de harinas animales.
El Gobierno empleará 200 millones de pesetas, procedentes del Fondo de Español de Garantía Agraria, para comprar 4.000 toneladas de piensos elaborados con harinas cárnicas, medida que se inscribe en el plan de actuaciones para atajar el mal de las «vacas locas». La normativa comunitaria establece que los Estados miembros velarán para que todas las proteínas elaboradas y destinadas a la alimentación de los animales de granja mantenidos, cebados o criados para la producción de alimentos, sean retiradas del mercado, de los circuitos de distribución y de los almacenes ubicados en las propias explotaciones, a partir del 1 de enero de 2001.