Los caladeros de vieiras, un molusco que en Málaga se conoce como peregrina, están cerrados desde principios de año, ya que se ha observado una presencia muy alta de toxinas, en concreto 1000 microgramos por 100 de materia viva, cuando el máximo permitido está en 80 microgramos por 100. Pero ha sido el decomiso de 120 kilogramos de este molusco proveniente de Portugal, que contenía biotoxinas, lo que ha provocado que la Delegación de Agricultura y Pesca andaluza, cuyo máximo responsable es José María Rodríguez, ponga en alerta a los ciudadanos a la hora de consumir este molusco.
Las toxinas encontradas en las peregrinas, (PSP y ASP), son peligrosas para la salud ya que la PSP puede provocar parálisis y la ASP amnesia o parálisis cerebral. «Los marisqueros nos han pedido en innumerables ocasiones que abramos los caladeros, pero está en juego la salud de los ciudadanos, y la Delegación de Agricultura y Pesca y la Inspección Pesquera deben velar por su seguridad alimentaria», argumentó Rodríguez.
Por estos motivos, el delegado aconsejó ayer a los ciudadanos que pregunten primero la procedencia de estos moluscos si van a adquirirlos, -un derecho de los consumidores-, y que conozcan que los de Málaga no son aptos para el consumo. En el mercado se venden en estos días vieiras de otros caladeros europeos, pero la Inspección Pesquera ya ha constatado en varios casos que las provenientes de Portugal y Grecia están contaminadas.
Ésta es la tercera vez en este año que la Inspección Pesquera realiza un fuerte decomiso de estos moluscos. El primero, con más de 5.000 kilos, lo llevó a cabo a principios de año en el puerto de Málaga, ya que las vieiras mostraban en los análisis la toxina PSP. El segundo, se saldó con la aprehensión de más de 1.000 kilos de peregrinas congeladas en el polígono de la Huertecilla con la misma toxina. Estas biotoxinas se producen por una inexplicable concentración de microalgas, que impiden que los moluscos afectados por el PSP (paralizante), ASP (amnésica) y DSP (diarreica), puedan entrar en la cadena alimentaria, ya que representan un peligro para la salud.