Melilla ha registrado durante el último año un aumento del 25% de los casos de hepatitis A debido al consumo de bivalvos contaminados que no cuentan con el debido registro sanitario, según anunció la consejera de Bienestar Social de Melilla, María Antonia Garbín.
Procedentes de Marruecos, estos moluscos -almejas, concha fina, mejillón, coquinas, navajas- no han pasado por las analíticas correspondientes, por lo que su consumo conlleva un alto riesgo de contraer la citada enfermedad. Por ello, se desaconseja el consumo de estos moluscos en establecimientos hosteleros que no cuenten con las debidas garantías sanitarias y la compra callejera de estos moluscos, según recomendó Garbín.
Para advertir del peligro de su ingesta, la Consejería de Bienestar Social va a emprender una serie de campañas informativas destinadas a las empresas de restauración y a los consumidores. Además, las autoridades melillenses han editado un tríptico sobre «Prácticas correctas de higiene en el sector de restauración» para repartirlo entre los diferentes establecimientos comerciales de la ciudad. «Está prohibido tener los bivalvos si no se acompañan de marca sanitaria», según recuerda este folleto, que aconseja a los propietarios hosteleros sobre la forma de efectuar la recepción de los alimentos, cómo deben conservarse y las condiciones que deben reunir los locales.
Una vez finalizada esta campaña de información, fuentes de Bienestar Social indicaron que se llevará a cabo una inspección por todos los establecimientos de hostelería para comprobar que se cumplen todas las garantías sanitarias al respecto.