Una vez terminada la Navidad, llega el momento de perder los kilos de más cogidos durante estas fiestas. Desde el Servicio de Endocrinología del Hospital Clínico de Madrid recomiendan darse al menos un mes de plazo para recuperar el peso anterior a estas fechas.
Para ello, los especialistas recomiendan establecer un plan de alimentación sensato y sin recurrir a dietas extravagantes, ya que de otra forma «se puede caer en el periodo de ganancias y pérdidas en forma de yo-yó», y provocar «que no se obtenga una pérdida de peso adecuada», según explica el doctor Miguel Angel Rubio, endocrino de dicho hospital.
Rubio señala que «el estómago se acostumbra a ingerir grandes cantidades de alimento durante la Navidad, lo que no nos permite realizar una dieta muy drástica», y añade que por este motivo es recomendable tomar alimentos de pocas calorías y mucho volumen como cereales integrales y muchas ensaladas, «que proporcionan sensación de plenitud y de no pasar hambre».
La manera de comenzar la dieta correctamente «es recuperando aquellos alimentos que se han dejado de lado durante la Navidad, es decir, los que aportan muchas vitaminas, minerales y antioxidantes que se encuentran en frutas, verduras y zumos», indica Rubio, quien recuerda que el régimen «debe ir acompañado de 30 minutos de ejercicio diario».
Generalmente, durante las navidades se aumenta de peso entre dos y cuatro kilos. Para el doctor Rubio el objetivo primordial es eliminarlos ya que si no se acumulan, y puntualiza que «si una persona decide continuar con la dieta, debe perder solamente entre el 5% y el 10% de su peso corporal». A partir de aquí, «lo recomendable es ponerse en manos de un especialista».
En este sentido, Rubio subraya que todas las dietas que hacen perder más de un kilo de grasa a la semana revelan que estamos perdiendo agua y proteínas que «son vitales para nuestro organismo», y enfatiza que «cualquier dato que estuviera por encima de estas previsiones requeriría una supervisión médica, en aras de evitar deficiencias nutricionales y desequilibrios en la dieta».
El doctor considera que lo esencial es mantener «una dieta hipocalórica, rica en nutrientes, vitaminas y minerales, evitando perder agua y proteínas en lugar de grasa, ya que se puede tener la sensación de estar perdiendo peso, y en cuanto se deje la dieta volver a ganarlo rápidamente».
Para combatir el hastío que provoca la dieta, Rubio aconseja introducir alimentos como espárragos y champiñones, que son bajos en calorías. «Así se consigue una alimentación variada y que cumple los requisitos de una dieta equilibrada», concluye.