Los medicamentos basados en soja que garanticen una concentración adecuada de isoflavonas alivian los sofocos que afectan al 80% de las mujeres en la menopausia. Así lo afirma Concha Navarro, catedrática de Farmacología de la Universidad de Granada y presidenta del Centro de Investigación sobre Fitoterapia (INFITO), en una revisión de estudios realizada por INFITO y presentada durante el III Congreso de la Asociación Española para el Estudio de la Menopausia (AEEM), que se celebra esta semana en Granada.
Esta revisión subraya que la cantidad de soja que puede consumirse a través de la dieta, incluso con suplementos alimenticios, no garantiza la suficiente concentración de isoflavonas de soja que permitan aliviar los sofocos y otros trastornos asociados a la menopausia.
El doctor Santiago Palacios, director del Instituto Palacios de Salud de la Mujer, dirigió un estudio con un preparado farmacológico de 75 miligramos de isoflavonas de soja que, consumido en dos tomas, reducía los sofocos en un 80%. También en el último libro blanco sobre la soja, editado en 2007 bajo los auspicios de la Sociedad Española de Ginecología Fitoterápica (SEGIF) y la Sociedad Española de Ginecología y Obstetricia (SEGO), se concluía que el 83% de los profesionales sanitarios considera que las isoflavonas de soja en la menopausia tienen menos riesgos que la Terapia Hormonal Sustitutiva (THS). Además, el último consenso científico español sobre fitoterapia en menopausia recomendaba las isoflavonas de soja para tratar los sofocos de la menopausia.
Una investigación publicada en el número de octubre de la revista «Journal of Nutrition» refleja que las isoflavonas de la soja podrían reducir la posibilidad de fracturas osteoporóticas y tener una acción preventiva para diferentes factores de riesgo cardiovascular. Por último, el equipo investigador del doctor Palacios acaba de publicar otro estudio en el que se demuestra, por primera vez, que un medicamento de soja es seguro para la mama y el endometrio a largo plazo (tres años de tratamiento).
