Un estudio realizado por investigadores de la Universidad de Glasgow, en Escocia (Reino Unido), demuestra que los polifenoles, sustancias antioxidantes presentes en muchas frutas y hortalizas, también se absorben por el organismo cuando se ingieren a través de zumos. La bebida utilizada como prototipo se elaboró tras seleccionar diferentes alimentos ricos como fuentes naturales de polifenoles, como la uva, la manzana, frutas cítricas y té verde.
El trabajo, que se publicará en la revista «Molecular Nutrition and Food Research», pretendía determinar si una bebida con mezcla de extractos provenientes de diferentes fuentes puede proporcionar los compuestos fenólicos necesarios para el organismo a través de una fórmula más «cómoda» para el consumidor.
Los autores realizaron para esta investigación análisis en muestras de plasma y orina recogidas a las 24 horas de haber tomado una bebida rica en polifenoles a 10 voluntarios sanos. Los investigadores analizaron la absorción y el metabolismo de los componentes polifenólicos originales y sus metabolitos. Los resultados de farmacocinética en plasma y del recuento de metabolitos en orina demostraron que la disponibilidad de catequinas del té, las flavononas de los cítricos, las dihidrocalconas y el ácido 5-O cafealquínico de la manzana, en todos los casos y de manera independiente a la cantidad, fue similar a la registrada en otros estudios de alimentación con té verde, zumo de naranja, jugo de manzana y café.
Se confirmó así que la combinación de compuestos polifenólicos en un zumo rico en esas sustancias se absorbe y se excreta de forma similar a si provienen de fuentes naturales de forma individual. Además, se confirmó que los diferentes tipos de polifenoles se absorbían en proporciones distintas y en varias localizaciones del tracto intestinal, lo que sugiere que el potencial efecto protector de los metabolitos polifenólicos permanecerá en el torrente sanguíneo durante más tiempo si se toman juntos que si provienen sólo de una fuente.