La naturaleza ofrece en primavera una gran variedad de verduras. Cuando se tiene la intención de congelar estos vegetales, es muy importante respetar el calendario de recolección para obtener los alimentos en su mejor momento, el punto justo de maduración. Y, por supuesto, resulta esencial someterlos de forma inmediata al proceso de ultracongelación. De esta manera se logran productos de gran calidad en vitaminas y minerales. A través de este procedimiento, las verduras congeladas llegan a la mesa con las mismas condiciones con las que fueron recolectadas del huerto en la estación primaveral, tal y como se detalla en este artículo.
Una de las grandes ventajas de las verduras congeladas es que pueden consumirse en cualquier momento del año. Sin embargo, cada alimento se recoge en su momento óptimo de maduración. En el caso de la primavera, se trata de una estación de fuertes cambios: en el primer mes aún se mantienen temperaturas muy frías, pero poco a poco se va produciendo la llegada del buen tiempo.
Como durante el primer mes de la estación hace frío, todavía es posible encontrar las últimas coles y coliflores, alcachofas, acelgas, espinacas y puerros. Pero este tipo de verduras desaparecerá con la buena climatología propia de la primavera. Se inicia entonces la recolección de lechugas, rábanos, hinojo, habas, guisantes, espárragos, judías verdes, zanahorias y cebollas que, aunque uno esté acostumbrado a consumirlas durante todo el año, encuentran en la primavera su mejor momento de maduración.
Habas
Las habas son legumbres con un gran valor nutricional y su recolecta comienza con la llegada del buen tiempo. Se trata de un alimento rico en proteína vegetal, hidratos de carbono y fibra. Contiene vitaminas C, A, B1 y B2, antioxidantes, magnesio y zinc. Aporta energía al organismo, favorece la digestión y el tránsito intestinal y cuenta con un contenido en grasas casi nulo, por lo que es el componente perfecto de una dieta orientada a perder peso.
Guisantes
Los guisantes son una legumbre muy nutritiva que se recolecta al inicio de la primavera. Es rica en proteína vegetal, hidratos de carbono y fibra y posee un porcentaje de grasas prácticamente nulo. Contiene minerales como potasio, fósforo, magnesio, calcio, hierro, zinc o selenio. Destaca por su contenido en vitamina A, B y C. Es un alimento saciante, por lo que resulta perfecto para quienes quieran perder peso. Los guisantes mejoran la circulación de la sangre y regulan los niveles de colesterol y de azúcar en sangre, además del tránsito intestinal. Un beneficio muy curioso de los guisantes es su capacidad para nutrir y cuidar las uñas, la piel o el cabello.
Espárragos
El espárrago es una planta herbácea, familia de otras verduras como la cebolla o el puerro. Se recolecta durante los meses de abril, mayo y junio. Constituye un alimento destacado en vitaminas A y C, potasio, niacina y hierro. Además, sobresale por ser una de las verduras más ricas en vitamina E. Muy beneficiosa para eliminar líquidos del cuerpo, supone un componente perfecto de una dieta enfocada a perder peso.
Cebollas
La cebolla es una de las hortalizas más comunes de la dieta mediterránea que, además, está muy presente en la medicina tradicional. Está compuesta por un 90 % de agua, proteína vegetal, fibra e hidratos de carbono en pequeñas cantidades. Aporta minerales y vitaminas C y B. La cebolla es conocida por su uso en remedios caseros y naturales. Tiene un gran poder para combatir la caída del cabello o rejuvenecer la piel. Es muy útil para enfermedades respiratorias (catarros, resfriados, gripes o bronquitis). Además, mejora la circulación de la sangre, ayuda a combatir bacterias y hongos, evita la retención de líquidos y facilita las digestiones.
Judías verdes
Las judías verdes o judías tiernas son legumbres pertenecientes a la familia de las leguminosas. Su recolección comienza en el mes de abril. Se caracterizan por su bajo contenido en grasas y calorías. Las judías verdes son muy ricas en fibra, vitaminas y minerales y resultan un alimento idóneo para dietas de adelgazamiento o para mujeres embarazadas. Disminuyen los niveles de colesterol en el organismo, bloquean la acción de los radicales libres y ayudan a prevenir el cáncer o enfermedades cardiovasculares y degenerativas.
Con el objetivo de concienciar a la sociedad sobre la necesidad de incorporar las verduras en la dieta diaria como hábito de vida saludable, la Asociación Española de Fabricantes de Vegetales Congelados (ASEVEC) cuenta con un espacio en Internet que permite conocer con profundidad y rigor el mundo de las verduras congeladas. En la página se puede ver el proceso de fabricación de las verduras congeladas, las zonas españolas donde se recogen las diferentes variedades, consejos de salud y hasta el mejor tratamiento y uso en la cocina para elaborar platos deliciosos.