La palabra Umeboshi significa ciruela hidratada y este alimento se viene utilizando como comida y medicina en China, Korea y Japón desde hace miles de años.
Cómo se elaboran…
Se escogen un tipo de ciruelas verdes japonesas y se dejan secar en esterillas de arroz expuestas al sol durante el día y al aire libre durante la noche. El sol seca y endurece las ciruelas y las gotas del rocío del amanecer las ablanda. Este proceso se repite durante varios dias. Como resultado la ciruela se vuelve más pequeña y se arruga. Entonces las ciruelas se empacan en barriles, se espolvorean con sal marina y se les coloca peso encima. Es ahora cuando, por acción de la sal y la presión comienzan a fermentar. Si la fermentación es corta, adquieren un color amarillento y su pulpa es todavía firme. En fermentaciones más largas (de 2 ó más años de duración), se ablandan, toman un color rosa oscuro y ganan en calidad y propiedades.
Valor nutritivo:
El Umeboshi contiene dos veces más proteínas y minerales que otras frutas. El calcio (65 mg/100 g), hierro (130 mg/100 g) y fósforo (2,7 mg/100 g) son especialmente abundantes. Así mismo, destaca su riqueza en ácidos orgánicos, superior a la de cualquier otra fruta (especialmente ácido cítrico y fosfórico) y que no se descomponen durante el proceso de la fermentación. Son los distintos ácidos presentes en el umeboshi, los que ejercen acciones positivas en el organismo, puesto que: – Contribuyen a eliminar el exceso de acidez en el estomago. – Aceleran el movimiento intestinal, por lo que mejoran el estreñimiento debido a su efecto laxante. – Ayudan a eliminar sustancias de desecho al estimular el funcionamiento del hígado.
¿Cómo utilizar el Umeboshi?
Puede consumirse sola o mezclada con otros alimentos, tales como sopas y salsas. Se comercializa entera, en tarros de vidrio o a granel en tiendas de alimentación natural. En pasta es muy práctica para añadir a las salsas. Se conservan largo tiempo en bote de cristal bien cerrado, en un lugar fresco o en el refrigerador.