Las revistas femeninas juveniles pueden precipitar la aparición de casos de bulimia y anorexia, según un estudio de la profesora de Periodismo de la Universitat Pompeu Fabra Mònica Figueras. El trabajo advierte que la época en la que se producen más casos de trastornos alimentarios coincide con los meses en que estas revistas animan a sus lectoras a preparar su cuerpo cara a la primavera.
La investigación analizó los reportajes informativos y la publicación directa e indirecta de las revistas «Ragazza», «You» y «Mujer 21». Desde el punto de vista informativo, estas publicaciones mensuales, que llegan a casi 600.000 personas en España, suponen uno de los principales vehículos de información para las adolescentes.
Según Figueras, estas revistas «transmiten una imagen frívola de la adolescente, únicamente preocupada por la estética». Así, «se evitan temas importantes en la vida de los jóvenes como su desarrollo intelectual y creativo, la participación en la sociedad civil, los valores humanos, sus relaciones laborales o su futuro laboral», advierte el estudio.
La estética y la belleza femenina están presentes en el 40% de páginas de dicha publicaciones y en el 71% de anuncios publicitarios. «La figura esbelta, la piel bronceada, depilada y sin celulitis es el canon actual de mujer que ofrecen estas revistas», afirma la autora del estudio.
Estas revistas «muestran fórmulas para alcanzar la figura ideal, mediante esfuerzo y el uso de recetas mágicas como dietas alimentarias poco rigurosas», según el informe. Figueras alerta de que la «presión por estar en guardia» puede afectar a «la autoestima de la chica o generarle insatisfacción y malestar que pueda restar importancia a otros éxitos escolares o sociales».
Además, algunos de los síntomas de los trastornos alimentarios, como el cuidado del cuerpo, el sacrificio, narcisismo, el reconocimiento hacia los otros, el control como virtud y la sensación de saciedad para no comer más están «omnipresentes» en estas revistas, advierte el estudio.
Los expertos consideran que los trastornos alimentarios son la segunda causa de muerte entre los jóvenes, después de los accidentes de tráfico. El 15% de jóvenes de entre 12 y 24 años tiene alteraciones en el comportamiento alimentario, que principalmente se dan entre el sexo femenino.