Los adolescentes consumen poco tabaco convencional. Prefieren los nuevos dispositivos para fumar, como apuntábamos en este artículo sobre la moda del vapeo en menores. Y para que no se note este hábito, se decantan por cigarrillos electrónicos con diversos sabores y diseños tecnológicos (relojes inteligentes, memorias USB, juguetes…) que cada vez se parecen menos a todo lo conocido como tabaco tradicional. Pero ahora hay otro tipo de productos de nueva generación que están llegando a los más jóvenes a través de redes sociales como TikTok y cuyo consumo puede pasar más inadvertido. No contienen tabaco, pero sí la adictiva nicotina. Te contamos qué son y sus efectos en la salud.
Fumar no se lleva y el vapeo empieza a no tener buena fama. Aun así, los cigarrillos electrónicos y otros dispositivos para fumar triunfan entre los más jóvenes. Pero, como recuerdan continuamente los especialistas, entre ellos la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria (AEPap), ninguna de estas alternativas al tabaco convencional son inocuas, por mucho que se camuflen con diseños atractivos para captar la atención de los menores, como también ocurre con el alcohol (hay hasta gominolas de ositos con alcohol).
Tampoco resultan inofensivas otras opciones que comienzan a verse en nuestro país, y eso que su consumo parece “invisible”. Son las bolsitas de nicotina o los nicotine pouches.
Qué son y por qué resultan atractivas para los más jóvenes
Los nicotine pouches son la última moda en productos alternativos al tabaco. Estas bolsitas no contienen tabaco, pero sí nicotina sintética, además de otras sustancias como celulosa microcristalina, carbonato de sodio, otras sales de carbónico, ácido cítrico y diversos aromas. La cantidad media de nicotina por saquito, según un informe realizado el Instituto Federal para valoración de Riesgos (BfR) en Alemania y difundido por el Ministerio de Sanidad en España, es de 47,5 mg —1 mg tiene un cigarrillo y 40 mg, un cigarrillo electrónico—.
Su diseño con forma de pequeña almohadilla se asemeja a un chicle o a una bolsita de té o de cualquier otra infusión, por lo que no parece dañino. Visualmente es igual que el snus, una bolsita de tabaco muy popular en Suecia, pero prohibida en el resto de la Unión Europea. Y mientras que el snus destaca por su color marrón porque contiene tabaco, el nuevo producto es blanco. De ahí que también se conozca como snus blanco.
Estos pouches se venden en cajas metálicas redondas, como si fuesen envases de caramelos, con unas 15-25 unidades por unos 4 o 5 euros, según la marca y la dosis de nicotina. Al igual que los cigarrillos electrónicos, los hay de distintos sabores: menta, regaliz, cola, lima-limón cítricos, bayas… Y como sucede con los vapers, estos productos se compran con facilidad por Internet en tiendas de vapeo y cachimbas: con solo clicar en un botón afirmando que se es mayor de 18 años, es posible recibirlas en casa. Además, también se pueden adquirir en algunos estancos.
🔴 ¿Cómo se consumen las bolsas de nicotina?
No se ingieren. Estos saquitos se colocan entre la encía y el labio superior y se deja en esta zona de la boca durante unos 20-30 minutos, el tiempo que tarda en disolverse. Así, con una sola bolsita, tu cuerpo puede estar absorbiendo nicotina por vía sanguínea sin que nadie se dé cuenta; es decir, son como “invisibles”. Y esa característica supone otro gran atractivo para los menores, ya que su consumo pasa totalmente desapercibido en entornos donde está prohibido el tabaco (bares, colegios, centros de trabajo…).
Efectos de las bolsitas de nicotina
No es necesario calentar su contenido, como pasa con los cigarrillos electrónicos o convencionales. Aun así, su consumo conlleva riesgos.
De primeras, la nicotina es un producto altamente adictivo con los siguientes efectos:
- acelera la frecuencia cardiaca.
- aumenta el estado de alerta y atención.
- sube la presión arterial.
- puede reducir el apetito.
Por vía oral, la dosis tóxica aguda estimada está establecida en 5 mg/kg de peso. Los síntomas leves de intoxicación son náuseas y vómitos. Una intoxicación de mayor intensidad incluye diarrea, aumento de la salivación y ralentización del ritmo cardíaco. Y la intoxicación grave se caracteriza por convulsiones y depresión respiratoria.
Además, estudios científicos también relacionan el consumo de nicotina con el aumento de resistencia a la insulina y, por tanto, de la aparición de diabetes tipo 2.
🔴 ¿Qué hacen las bolsas de nicotina?
La asociación Nofumadores afirma que hay estudios que han demostrado que un pouch de 6 mg produce un aumento promedio de 10 latidos cardiacos por minuto. Además, como apuntan en la Universidad de Nebraska (EE. UU.), su consumo directo puede ocasionar dolor de garganta y la boca, irritación en la encía e hipo. Y aunque la mayoría de la nicotina se absorbe por la mucosa oral, también puede disolverse en la saliva y digerirse, acabando en el tracto gastrointestinal.
Tal y como recoge el informe alemán sobre 44 de estas bolsitas, “al menos la mitad del contenido de nicotina puede ser absorbido, alcanzando niveles relevantes en sangre semejantes a los alcanzados tras el consumo de cigarrillos convencionales y en algunos cigarrillos electrónicos”. En el caso de los pouches de alta dosificación, alertan de que los niveles de nicotina en sangre pueden superar significativamente a los alcanzados con los cigarrillos normales. También señala que su consumo conlleva riesgo cardiovascular y en mujeres embarazadas puede incrementar el riesgo de muerte fetal.
⚠️ Grupos de riesgo
Por todo ello, y aunque se desconocen los efectos a largo plazo debido a su reciente creación, define tres grupos de riesgo:
- niños, adolescentes y no-fumadores, porque la nicotina es una sustancia adictiva.
- mujeres embarazadas y lactantes, por los efectos de la nicotina durante la gestación y su paso a la leche materna.
- personas con enfermedades cardiovasculares, ya que la nicotina tiene fuertes efectos sobre el sistema cardiovascular.
🔴 ¿Nicotine pouches para dejar de fumar?
Por su parte, sus defensores, como el movimiento Smoke Free Sweden, lo califican como “una nueva generación de productos alternativos de nicotina de riesgo reducido”; es decir, no dudan de que su consumo tiene efectos negativos, aunque menores en comparación con los cigarrillos, y reconocen que es un producto que genera adicción.
Un trabajo publicado en 2021 sugiere incluso que tiene un perfil tóxico parecido a los productos de terapia de reemplazo de nicotina, como chicles o parches. De hecho, consideran que su acceso “puede haber ayudado a los fumadores, que no eran usuarios de snus, a dejar de fumar, ayudando a Suecia en su objetivo de ser libre de humo”.
Sin embargo, los grupos antitabaco no opinan lo mismo y creen que estos productos son estrategias de la industria tabaquera para sortear las restricciones legales y enganchar a las nuevas generaciones a sus productos de nicotina; es decir, que son una nueva puerta de entrada al tabaco.
Situación legal de las bolsas de nicotina
Estas bolsitas de nicotina empezaron a estar disponibles en Suecia en 2018 y un año después en el resto de Europa. Pero ahora es cuando se ha conocido su enorme difusión por parte de diversos influencers en TikTok, la red social que más engancha a los menores en nuestro país, y la penetración en la Premier League inglesa (un estudio señala que uno de cada cinco de sus futbolistas consume estos pouch o snus).
Mientras Suecia, Estados Unidos y Reino Unido son los países en los que más se consume, en Países Bajos o Bélgica este producto ya está prohibido, una medida “inmediata” que solicitan asociaciones como Nofumadores, “para no caer en los mismos errores que se han cometido con el vapeo”.
Y es que hoy por hoy, este sector vive en un vacío legal. Como comentan desde la Comisión Europea, las bolsitas de nicotina, al no tener tabaco, quedan fuera del ámbito de aplicación de la Directiva 2014/40/UE sobre los productos del tabaco. Aun así, sostienen que “la regulación de productos emergentes, como las bolsitas de nicotina, ocupa un lugar central en la evaluación en curso, en consonancia con el objetivo de la generación libre de tabaco de proteger mejor la salud de los ciudadanos y, en particular, de los jóvenes contra los riesgos derivados del tabaco y los productos relacionados”.
➡️ Medidas en España
Y en esa senda trabaja el Gobierno en España, que está pendiente de redactar la modificación del Real Decreto 579/2017, de 9 de junio, por el que se regulan determinados aspectos relativos a la fabricación, presentación y comercialización del tabaco y productos relacionados, en la línea de su recién aprobado ‘Plan integral de prevención y control del tabaquismo’ (PIT) 2024-2027. ¿Y cuáles son estos productos relacionados?
Precisamente, en la justificación del PIT los nombra de forma expresa: los cigarrillos electrónicos, con y sin nicotina, los productos a base de hierbas para fumar/shisha, las bolsitas de nicotina o nicotine pouches y cualquier otro producto con contenido en nicotina, ya sea natural o sintética, como sin ella, que se utilice con carácter recreativo y/o que imite el acto de fumar, lo induzca o guarde relación en cuanto a su consumo tradicional y/o social.