Los entuertos son contracciones bruscas del útero. En general, se producen durante los primeros cinco o seis días posteriores al parto, aunque son más frecuentes e intensos en las primeras 48 horas y cuando el bebé está mamando. ¿La explicación? Muy simple: en el momento de dar el pecho, se liberan cantidades importantes de oxitocina, una hormona que, además de incidir en la producción de leche, también provoca contracciones.
Volver a la normalidad
Los entuertos o ‘contracciones posparto’ resultan molestos y, en ocasiones, bastante dolorosos. Sin embargo, son importantes y necesarios. Su función principal es reducir el sangrado y evacuar los coágulos que se forman dentro del útero, especialmente en la zona donde estaba adherida la placenta. Asimismo, esta respuesta fisiológica ayuda la matriz a recuperar su tamaño normal. Hay que tener presente que, durante el embarazo, este órgano triplica su tamaño y multiplica por diez su peso (llega a pesar casi un kilo) para poder albergar al bebé.
¿Son muy dolorosos?
Esto depende de la mujer y de la cantidad de hijos que haya tenido. Los entuertos son más intensos y frecuentes tras el nacimiento del segundo hijo, ya que las paredes del útero quedan más laxas o flácidas y necesitan más ‘impulso’ para regresar a su tamaño natural. Por esta razón, muchas madres primerizas ni los notan. En cualquier caso, la sensación va desde una molestia -similar a la que se tiene durante la regla-, hasta un dolor breve y agudo, como un cólico.
¿Cuándo aumenta el dolor?
Además de haber tenido más de un parto, existen otras situaciones que aumentan la intensidad de estas contracciones.
- Tras una cesárea
- Al dar el pecho. Cuando el bebé está mamando, se liberan importantes cantidades de oxitocina y crece la frecuencia e intensidad de los entuertos
- Si se administra algún suero con oxitocina, por la misma razón
- Tener un niño muy grande o un parto múltiple, aunque sea el primero. En estos casos, el útero se dilata más de lo habitual y, en consecuencia, necesita contracciones más bruscas para volver a su sitio
¿Cuánto tiempo duran?
Alrededor de una semana, en general menos. Los días más duros son los dos primeros. A partir de las 48 horas, los entuertos se producen más espaciadamente y con menor intensidad, hasta desaparecer. Si no es así, conviene consultar con el médico para descartar otros problemas.
¿Cómo mitigar el dolor?
Además de la paciencia y de pensar en positivo (esto dura solo unos días y luego, ya está), algo bastante útil es aplicar las técnicas de respiración y relajación que se han aprendido para sobrellevar las contracciones previas al parto. Si aun así el dolor es demasiado intenso, siempre es posible pedir un calmante. Lo fundamental es no automedicarse ni tomar analgésicos sin consultar previamente con el médico.