Hábitos de higiene desde los 2 años
⭐ Lavarse las manos
No vale hacerlo de cualquier manera. En cuanto tu hijo se muestre interesado en limpiarse las manos, enséñale esta infografía de lavado de manos para niños. En ella verá cómo y cuándo hacerlo correctamente, porque es importante limpiarse las manos antes de las comidas, al llegar a casa y en otras muchas situaciones. Para las uñas pueden usar un cepillo especial para peques, pero todavía es pronto para saber hacerlo (con seis años).
⭐ Lavarse la cara
Por las mañanas, esta rutina le ayudará a despertarse y quitarse las legañas. Antes del rostro, el peque debe lavarse las manos con agua y jabón. Después, llega el momento de la limpieza de la cara. Será solo con agua (con jabón suave, solo si se ha ensuciado) y con pequeños toques para secarla. Y a no ser que haya algún problema de piel o tenga acné, no es necesario hacer nada más, como aseguran los dermatólogos. Y es que la cosmeticorexia es un problema de cada vez más niñas y adolescentes.
Hábitos de higiene a partir de los 3 años
⭐ Limpiar las orejas y los oídos
Los días que toca lavarse la cabeza, como cuando se baña en la piscina, el mar o el río, también toca limpiarse bien los oídos. ¿Cómo? Nunca se deben introducir bastoncillos de algodón ni cualquier otro objeto. Tan solo hay que secarlos bien con cuidado y por todos los pliegues ayudándose de una toalla.
⭐ Cepillarse el pelo
Puede empezar a hacerlo él solito después de cada baño. Así, poco a poco, cogerá el hábito de cepillarse el pelo al menos cada vez que salga de casa y, siempre por supuesto, bajo tu supervisión. En el caso de que tenga el pelo largo, otra cosa son los peinados, que por el momento correrá de tu cargo hasta que coja destreza para hacérselos.
⭐ Sonarse la nariz
Puedes seguir ayudándole a hacer lavados nasales, pero con 3-4 años ya es el momento de que se quite los mocos él solito. Mira cómo enseñar a tu hijo a sonarse la nariz.
⭐ Limpiarse los pies
A veces, los pies huelen mal o tus hijos han estado descalzos y se los han ensuciado. Enséñale a lavarlos por todas partes (la planta, el empeine y entre los dedos) y lo más importante: a secarlos bien para evitar humedades que ayuden a la proliferación de microorganismos.
⭐ Cortarse las uñas
A partir de los cinco años, el peque puede practicar esta rutina justo después de hacer el baño y después de haber practicado con figuras de uñas de papel y una tijera de puntas redondas. Aprenderá primero a cortar en recto las uñas de los pies y, después, las de las manos, que tiene que llevarse a cabo con una pequeña curva. Para las manos siempre le resultará más fácil un cortaúñas. Y hay que dejarle claro que nunca se tire de un pellejito o padrastro, porque hay riesgo de infección.
⭐ Limpiarse el ano
¿Te acuerdas cuando tu hijo dio los pasos para decirle adiós al pañal? ¿Hace tiempo? Pues ya es hora de que se limpie solo cuando va al baño. Lo más importante, sobre todo en el caso de las niñas, es que lo haga siempre de adelante hacia atrás con suaves movimientos. También lo es que no se levante del retrete hasta que el último trozo de papel utilizado esté limpio, eche todo el papel sucio por el inodoro, tire de la cadena y se lave después las manos con agua y jabón. Recuérdale que, si son toallitas húmedas, las lleve al cubo de basura por el bien del medio ambiente.
Hábitos de higiene a partir de los 6 años
⭐ Ducharse
El momento del baño es muy especial para los peques. Como explican desde la Asociación Española de Pediatría (AEP), “a partir del año de vida los niños pueden entender lo que está ocurriendo y comenzar a participar en su higiene. Pasados los 2 años de edad los niños ganan en autonomía, lo que justifica que los padres pasen a una fase cada vez más pasiva en la que el niño realiza su higiene y los padres le supervisan”. Pero no será hasta que cumpla seis años cuando el peque pueda enjabonarse y aclararse a conciencia y bien en la ducha cada día.
Déjale a mano la esponja y el gel, para evitar riesgos, como también el agua del grifo en la temperatura adecuada. Y, por supuesto, coloca una alfombra antideslizante o pegatinas para evitar accidentes. Enséñale a poner siempre en el suelo la alfombrilla para la salida, además de la toalla y la ropa de cambio cerca. Al principio, en todo ello deberá contar con tu compañía. Después, bastará que esté la puerta entreabierta por si necesita llamarte y que te pases de vez en cuando para comprobar que todo va bien.
⭐ Lavarse el pelo
No hace falta que lo haga todos los días, pero conviene que al principio esta higiene se realice a la vez que el cuerpo. Eso sí, cerciórate las primeras veces de que se ha distribuido el champú por toda la cabeza y que se lo aclara bien. También puede ayudarse con un espejo. Deja que primero se seque el pelo con una toalla y, después, que use el secador con poca temperatura. ¡No le pierdas ojo por los enchufes!
Hábitos de higiene a partir de los 8 años
⭐ Cepillarse los dientes
Si bien la higiene dental debe empezar desde la erupción del primer diente de leche (con cepillo específico para bebés, no dedal de silicona), a partir de los tres años el peque ya debe limpiar sus dientes con un cepillo dental infantil y poca pasta (como un guisante). Con seis años, ya puede cepillarse él mismo, pero, aun así, los especialistas insisten en que hasta los 7-8 años sus progenitores lo hagan por él.
A estas edades usará solo el cepillo manual, y una vez que lo domine, podría emplear el cepillo eléctrico. La cantidad de pasta dental es del tamaño de un garbanzo y la concentración de flúor ya puede subir a 1.450-1.500 ppm. Es esencial lavarse los dientes tras las comidas, y especialmente por la noche. De hecho, los expertos pediátricos (Sociedad Española de Odontopediatría y AEP) comentan que “a partir de este momento y hasta la adolescencia, se recomienda la supervisión por un adulto en el cepillado nocturno”.
⭐ Usar desodorante
Además de ducharse a diario y usar ropa de algodón, conviene que a partir de ahora emplee desodorante sin alcohol en formato roll-on específicamente diseñado para la población infantil a fin de quitar el olor corporal del preadolescente.
⭐ Utilizar productos de higiene íntima
Si tu hija, antes de su primera regla, ya ha adquirido el hábito de ducharse a diario, ¡fenomenal! Y es que, con la menstruación, lo conveniente es que se bañe todos los días. Pero debe quedarle claro que, en esos días, debe procurar hacer una limpieza externa de los genitales: es decir, nunca debe lavar la vagina y menos aún con duchas vaginales, ya que así se aumenta el riesgo de infecciones. Y, por descontado, es muy importante el secado, que no haya exceso de humedad. Deja que conozca los productos de higiene íntima que existen en el mercado, y use el que prefiera.