Las clásicas felicitaciones de Navidad pueden adquirir una forma especial cuando hay un bebé en la familia. Con algo de creatividad, el niño puede convertirse en el protagonista de los mensajes para saludar y enviar buenos deseos a familiares y amigos. Este artículo explica algunas ideas creativas para que el bebé esté presente en las felicitaciones de Navidad, como postales impresas con sus fotos, tarjetas digitales que incluyan sonidos y animaciones, vídeos protagonizados por el bebé y mensajes de voz con sus balbuceos y risas.
El bebé, presente en las felicitaciones de Navidad
Vivirla con un bebé es una manera especial de celebrar la Navidad. Esto se advierte en muchos aspectos: la organización, los preparativos, la comida, los regalos. Una tradición en la cual también se puede plasmar, y de una manera muy divertida, la presencia del bebé es en las felicitaciones de Navidad.
Como indica Martina Calzada, mamá bloguera responsable de No sin mis hijos, «la Navidad es una oportunidad única para presentar en sociedad a quien aún no haya conocido al bebé, y para dar las gracias a quienes hayan visitado y llevado obsequios al nuevo integrante de la familia».
Esta presentación se puede efectuar a través de varias opciones, como las clásicas tarjetas impresas o bien su versión digital, vídeos o grabaciones de sonido. Se detallan a continuación.
1. Postales impresas
Con la ayuda de la tecnología, cada vez es más sencillo que cada uno diseñe sus propias tarjetas y postales de Navidad. Este diseño se puede efectuar de dos maneras. La primera es la más artesanal: tomar una foto, imprimirla y luego pegarla sobre un cartón o cartulina y adornarla como se desee.
La segunda requiere algo más de conocimientos de programas informáticos, como Photoshop o similares, para añadir textos, marcos y cualquier otra decoración a la imagen, y de esa manera imprimir ya el resultado final.
Las fotos permiten mucha creatividad, por supuesto. El bebé puede aparecer disfrazado de Rey Mago, del Olentzero, de Papá Noel, de uno de sus renos o cualquier otro motivo navideño.
En sitios web como Minimoi, Parajarito Pinzón y La niña sin nombre, se observan muchas fotos navideñas creativas con bebés y niños. Está claro que son trabajos de fotografía profesional, pero que pueden resultar inspiradores o generar ideas para pequeñas producciones caseras.
2. Tarjetas digitales
Las tarjetas digitales se pueden diseñar igual que las tarjetas impresas pero, en lugar de llevarse al papel, se pueden enviar a través de diversas vías: correo electrónico, redes sociales, servicios de mensajería (como WhatsApp), etc. De esta forma, se reducen los costos, ya que no hace falta imprimir y es muy barato felicitar la Navidad a familiares y amigos en cualquier lugar del mundo.
Pero la tecnología ofrece más que eso. Existen muchos portales web que permiten crear tarjetas personalizadas con sonidos y animaciones. En Slidely, se pueden crear galerías con diversas fotos, darles movimiento y musicalizarlas. Con las fotos del bebé, algunos adornos navideños y la melodía apropiada, se puede lograr una felicitación de Navidad muy bonita y original.
3. Vídeos
Un vídeo en que el los padres feliciten la Navidad en compañía del bebé es una alternativa estupenda. También resulta bastante asequible en la actualidad, ya que la mayoría de los teléfonos móviles disponen de cámara de vídeo.
Si se cuenta con algo más de conocimiento y los programas necesarios para la edición, es posible realizar un vídeo tan simpático como este, en el que un bebé vestido como Papá Noel escribe un e-mail dirigido a los Reyes Magos. Al igual que las fotos mencionadas antes, si bien se trata de un trabajo profesional, puede servir como inspiración para creaciones caseras para felicitar a amigos y familiares.
4. Grabaciones en audio
Esta opción no es tan utilizada y, por ese motivo, puede resultar original: enviar un mensaje de voz. El aporte más valioso será que se incluya, por supuesto, la voz del bebé: sus balbuceos, su risa, sus gritos e, incluso, sus llantos serán una grata felicitación de Navidad.
Tiene la ventaja de que la mayoría de los teléfonos también incluyen grabador y, como el archivo resultante ocupa mucho menos espacio que un vídeo, se puede enviar por WhatsApp y otras vías sin mayor inconveniente.