Después de meses en los que Internet y las redes sociales han sido para los estudiantes valiosas herramientas de aprendizaje, resulta complicado reducir su uso en verano. “Aunque protesten, deberíamos tratar este asunto como antes del confinamiento, porque es fácil abusar de las tecnologías, así que conviene que los padres marquen pautas: si antes del encierro tenían una hora para trastear con Internet y con sus juegos, pues está bien mantenerla”, recomienda la pedagoga Yolanda Domínguez Frejo. Ahora bien, no se puede pasar del todo a la nada; hay que flexibilizar y compensarles de otras maneras, como por ejemplo, ofreciéndoles más tiempo para salir con sus amigos.
Según el Índice de la Economía y la Sociedad Digital (DESI) elaborado por la Comisión Europea, en 2019 cerca de la mitad de la población española seguía careciendo de las competencias digitales básicas y solo un 32 % contaba con ellas por encima de ese nivel. Durante el confinamiento, la inmersión total en la educación online ha obligado a padres, profesores y alumnos a dar el salto digital. Las estadísticas lo evidencian: en estos meses, el acceso a Internet ha crecido el 71 % durante las horas de máxima conexión, mientras que las herramientas de videoconferencia han experimentado una subida del 250 %.
Uso responsable de las pantallas: estas son las claves
Para garantizar un uso responsable, más allá del ámbito educativo, los padres pueden contar con iniciativas como Proyecto Conectados, que ofrece claves para educar a niños y adolescentes en el buen empleo de las tecnologías de la información y comunicación:
- 1. Dialoga con tus hijos, favorece la comunicación positiva y la escucha activa.
- 2. Establece normas claras para regular el uso de Internet, videojuegos y dispositivos.
- 3. Comparte con ellos el uso de la tecnología, especialmente cuando navegan por la Red: ayúdales a reconocer webs fiables, enséñales a identificar el porqué de lo que buscan o eligen consumir. Recuérdales que nunca deben proporcionar datos personales en Internet.
- 4. Elige bien los videojuegos a los que quieren acceder: infórmate sobre las normas PEGI (edad y contenidos) y supervisa los juegos que se intercambian con amigos.
- 5. Habla con ellos sobre el uso útil de un móvil: llamadas necesarias, mensajes importantes, respeto por el tiempo propio y por el tiempo de los demás. Ayúdales a hacerse responsables de su consumo, que siempre debe ser limitado, progresivo y acorde a su edad en tiempo y contenidos.
- 6. Cuando son pequeños, recurre a programas de control parental en ordenador, tabletas, móviles o videoconsolas para evitar que encuentren contenidos inadecuados a su edad.
- 7. Mantente al corriente de los avances de la tecnología y de la sociedad conectada, para que la llamada «brecha digital» no suponga un obstáculo en tu labor de educar a tus hijos.